SABINAS COAHUILA.- Con el llanto a flor de piel, la tarde de ayer familiares de Carlos Santiago Rodríguez, le dieron el último adiós a su héroe tras recuperar después de cinco días el cuerpo del joven minero que permaneció atrapado en las aguas de río Sabinas.
“Dios tú me lo diste y yo te lo entrego”, expresó la madre de familia entre sollozos, algo serena pero con los ojos hinchados de tanto llorar a lo largo de cinco días de búsqueda.
Fue la mañana de ayer los restos mortales de Carlos fueron velados en la capilla de funerales García donde se ofició una misa cerca de las 13:30 horas en presencia de familiares y amigos del infortunado padre de familia.
Como se recordará Carlos dio su vida por la de su esposa Jessica Guadalupe Nieto Martínez al intentar salvarla de ser arrastrada por las fuertes corrientes del río en el paraje conocido como el charco “Los Españoles”.
En punto de las 14:00 horas el féretro con los restos de Carlos fueron trasladados al panteón San Fernando donde su familia le brindo cristiana sepultura.
El dolor se hizo presente entre los padres, hermanos, esposa, hijos, amigos y compañeros de trabajo de la Mina 9, al brotarles el llanto por su ser querido a quien recordarán por siempre.
