Por la temporada conocida como “canícula”, y el ingreso del verano, a partir del pasado 21 de julio, la directora de salud municipal hizo un llamado urgente a la población a tomar las medidas adecuadas, para evitar daños a la salud, por efectos del “golpe de calor”.
Azalea Castro Hernández, dijo que el problema se presenta cuando el paciente se expone a altas temperaturas por tiempo prolongado, con síntomas principales de: Cansancio, fatiga, dolor de cabeza, náuseas, vómito, temperatura corporal elevada hasta de 40 grados centígrados, enrojecimiento del rostro, e incluso, desmayo, convulsión o muerte.
Destacó la importancia de la implementación de medidas preventivas, sobre todo, en las personas de alta vulnerabilidad: niños, lactantes, los que tengan enfermedades crónicas, con alguna discapacidad y adultos mayores quienes deben ser protegidos de las altas temperaturas y no exponerse a la intemperie.
“Les pedimos una especial atención, que ingieran constantemente líquidos, mucha agua, electrolitos; y para aquellas personas que trabajan al aire libre, que usen protector solar, sombrero, ropa clara para repeler los rayos solares y la ingesta de agua”, reiteró la directora de Salud.
Expresó que en caso de emergencia el paciente debe ser tratado de la siguiente manera: Antes de llamar a personal de socorro; colocarlo en una superficie, recostado, colocarle compresas o toallas con agua fría sobre su cuerpo, incluso se puede colocar al paciente en hielo para bajar rápidamente la temperatura corporal, para que recupere su estado de conciencia.
Informó que la dependencia a su cargo ya envió una serie de recomendaciones a los directores y jefes de oficina para que apliquen estas medidas y ayuden a los trabajadores, sobre todo, a aquellos que prestan servicio a altas temperaturas, para que lo hagan a temprana hora, les provean de agua, de bloqueador solar, ropas blancas y de sombreros.
