Por armar un escándalo en calles del Fraccionamiento 288, un matrimonio fue asegurado por la Policía Municipal, llegando a un arreglo sobre su divorcio al comparecer ante el Juez Calificador en turno.
Fue la mañana de ayer cuando oficiales preventivos fueron requeridos por una mujer, quien aseguró que en su domicilio se encontraba su todavía marido, a pesar que contaba con una orden de restricción en su contra.
De inmediato, elementos preventivos se dirigieron con rapidez a la vivienda, encontrando en el lugar a la pareja, quien discutía acaloradamente.
La mujer acusó a su marido de haber llegado a su casa para molestarla, mientras que el sujeto en su defensa argumentó haber ido en búsqueda de sus pertenencias, pero obtuvo una negativa por parte de la joven.
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Al escuchar lo anterior, los oficiales decidieron llevarlos a las instalaciones de Seguridad Pública, dónde dialogaron con el Juez Calificador, interviniendo más tarde sus respectivos abogados, por lo que llegaron a un arreglo sobre su divorcio.
