Todo comenzó cuando Evelyn Silva, madre de Selena, una niña
transexual, se dio cuenta de que muchos niños y niñas trans desertaban de la formación escolar o la pasaban mal en el colegio por su identidad y expresión de género; entonces, decidió comenzar un proyecto para crear una escuela abierta dedicada a ellas y ellos.
Berni, docente de esta escuela explica en una entrevista, que su principal tarea es formar a las familias para que comprendan los conceptos relativos a las identidades trans y ayudarles a comprender las necesidades de las niñas y los niños trans.
En esta escuela -que también lleva el nombre de la activista tras mexicana Amaranta López- el alumnado se prepara durante el año para presentar los exámenes necesarios que les permita acreditar un grado escolar.
En “Les niñes”, la identidad de género de cada persona es respetada plenamente, a cada quien se le reconoce con su nombre y género social.
“La escuela nace de un problema; les niñes trans no tenían escolaridad. Lo ideal sería es que estuvieran en el colegio que quisieran y se les tratara bien”, declara Berni en una entrevista para el medio chileno
Telenoche.
“Yo soy niña y voy a ser niña siempre. Nací niña, si tengo pene no me interesa”,dice Constanza, una de las alumnas al contar sobre un episodio de discriminación que vivió por parte de un compañero de escuela.
Además de trabajar en “Les niñas”, Evelyn es presidenta de “Fundación Selena”, una organización que se creó a raíz de que supo que su hija Selena es
transexual y que se encarga de atender necesidades de otras niñas y niños como ella.
Cuando Selena tenía aproximadamente 3 años y medio, Silvia se dio cuenta de la identidad de género de su hija. Y cuenta que antes pensaba “está jugando, se le va a pasar”. Sin embargo, en el momento en que la niña comenzó a enfermarse, aceptó que algo estaba pasando y decidió “avanzar” en el tema.
“Selena se levantaba en la madrugada y decía ‘mamá, ¿ya mañana voy a ser mujer?’”, relata Silvia y agrega “Si uno le preguntaba qué vas a ser de grande, ella decía ‘mujer’”.
El principal objetivo tanto para Silvia como para las otras personas que trabajan en “Les niñas” es brindar un espacio seguro e incluyente aunque su mayor deseo es que algún día, este tipo de escuelas no sean necesarias.
