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Hora Cero

Atropella a amigo por ganarle chica

Cruz Mancinas
Por Cruz Mancinas - 16 mayo, 2017 - 03:33 a.m.

El celoso sujeto no pudo soportar que la mujer prefiriera a su amigo y lo atropella  causándole serias fracturas

Por coraje, luego de haber conquistado el amor de una mujer, que ambos conocieron en el bar El Mitote, un hombre atropelló a su amigo de manera intencional, cuando caminaba con la chica en discordia sobre el Bulevar Benito Juárez la noche de ayer.

El joven lesionado se identificó ante los paramédicos de la Cruz Roja como Luis Eduardo Rosas Hurtado de 24 años de edad, vecino de la calle Alonso de León de la colonia Occidental.

Luis Eduardo y su amigo Cristian Iván Ramos Reyna de 24 años de edad, con domicilio en la calle Alfaro Tovar número 106 de la colonia Diana Laura de Frontera, se divertían en el bar El Mitote.

Ambos conocieron a Diana Ibarra Pecina de 23 años vecina de la Privada Morelos número 813 de la colonia Occidental de Frontera, sin embargo ella decidió seguir la noche en compañía de Luis Eduardo, negándose a marcharse con Cristian Iván.

Cegado del coraje de haber sido despreciado Cristian Iván, a bordo de su auto marca Volkswagen Jetta modelo 2002 color verde, los siguió.

Este logró darle alcance en el Bulevar Benito Juárez esquina con Zacatecas de la colonia Los Pinos y atropelló a su amigo Luis Eduardo de forma violenta e intencional.

El joven quedó bajo el auto, con fracturas múltiples en distintas partes del cuerpo, principalmente en la cadera, entre gritos fue inmovilizado por los paramédicos de la Cruz Roja quienes lo trasladaron primeramente al Hospital Amparo Pape de Benavides, pero debido a la gravedad de las lesiones ingresó al Hospital de Zona número Siete del IMSS para ser atendido.

La escena era realmente escalofriante, el cuerpo de Luis Eduardo quedó bajo el auto, un taxista de la línea Radio taxímetro de nombre Osvaldo Ramírez, se aprestó para ayudarlo, sacó un gato hidráulico de su auto y logró levantar el Jetta para sacar a Luis Eduardo, quien a gritos pedía que no lo movieran doliéndose de las fracturas que presentaba.

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