En donde otros ven enormes obstáculos en el camino de Denver rumbo al bicampeonato, los Broncos ven recuerdos.
Hace un año, intentaban parchar una porosa línea ofensiva, al igual que ahora.
Buscaban una mayor producción de sus tight ends y running backs, mientras se las ingeniaban sin Peyton Manning, misma situación en la que se encuentran en estos momentos.
“No creo que haya alguien en la ofensiva que diga que hayamos dado un juego completo’’, dijo el quarterback Trevor Siemian.
“Hemos ganado siete partidos y sabemos que podemos mejorar. No creo que haya muchos equipos que puedan decir eso y estar en esta posición’’.
Los Broncos (7-3) comienzan a sanar en la defensiva, tal como sucedió en este momento de la temporada anterior, cuando comenzaron a enfilarse rumbo al Super Bowl.
Y eso les da la confianza de que pueden recapturar la magia y convertirse en el primer equipo en defender exitosamente su título desde los Patriots de 2004.
“Aún no hemos jugado a nuestro mejor nivel, y creo que eso es alentador’’, dijo el gerente general John Elway la semana anterior.
Así que dejen que los Raiders (8-2) gocen de su resurgimiento y permitan que los Chiefs (7-3) celebren su registro de 17-3 en sus últimos 20 juegos de campaña regular.
Los Broncos no dan muestras de preocupación, y permanecen tan atrevidos como el equipo del año pasado.
“Estamos en una gran posición’’, dijo el cornerback Chris Harris Jr. “Depende de nosotros. Tenemos una oportunidad de ganarlo todo. Debemos aprovecharla’’.
