De acuerdo con trabajadores de salud y Prevención de la Violencia, por la temporada de calor suele elevarse la irritabilidad en las personas con conductas violentas, más consumo de alcohol y bebidas que pueden originar riñas y problemas, incluso ataques sexuales.
Mariela Ruvalcaba Ramírez, directora del Centro de Atención Familiar Especializado, señaló que la época intermedia del año es estresante, pues la influencia del calor aumenta la tensión y provoca accidentes, problemas económicos, familiares o relaciones amorosas.
Agregó que esta temporada de mayo a agosto no ha sido la excepción y se manifiesta en intentos de suicidio, más violencia familiar, así como delitos por lesiones debido a la irritabilidad en que caen las personas al no saber manejar su estrés.
“En nuestra cultura es raro hablar con siquiatra y psicólogos sobre la depresión o el estrés, o incluso hacer una llamada telefónica a los diferentes organismos que apoyan en estas etapas y que ayudan a salir adelante, por ello se refleja mayor tensión que ya se ha ido naturalizando”, añadió.
Los especialistas en salud mental señalan que el estrés surge cuando hay asuntos pendientes que requieren de mayor atención y concentración, pero si no se maneja la relajación o control, pueden llegar a complicarse con la salud y dañar los niveles nerviosos y emocionales, por lo que se convierte en una patología, porque empieza a cambiar la conducta generando acciones violentas y hasta suicidas.
