Contactanos

Coahuila

El arte de la pastelería

Dina Flores
Por Dina Flores - 02 enero, 2017 - 02:04 a.m.
El arte de la pastelería

Desde los 11 años le gustó a Ludivina  estar en la cocina

CASTAÑOS, COAH.- Su gusto por la pastelería comenzó a los once años de edad, siendo su madre Ludivina Falcón reconocida pastelera y repostera castañense, quien le enseñó las bases de todo lo que hoy sabe hacer, el proceso rudimentario que antes se empleaba en la elaboración de panes y galletas le sirvió de mucho pues hoy, más de treinta años después, nada se le dificulta.

Con una sonrisa en los labios Rosa Isela Martinez Falcón recibe a LA VOZ MONCLOVA en su casa ubicada en la colonia independencia, la bienvenida al hogar la da el hermoso aroma a galletas, pan y comida recién hechecita.

En la cocina, que es el laboratorio donde salen maravillas de panes de todo tipo, galletas simples, decoradas y para toda ocasión además de dulces, ahí se encuentra Rosy, como le dicen de cariño.

Platica que a temprana edad comenzó a hacer panes que aprendió con su mamá, ella fue su primera maestra con la que se convirtió en su ayudante, en ese entonces no había batidoras y todo se hacía a mano. Era algo cansado pero de mucho le sirvió porque aprendió nuevas técnicas.

Estando en la escuela se animó a hacer pasteles para las amistades y repentinamente comenzó a trabajar de manera independiente, dominando la pastelería, la repostería y el decorado al grado de que la gente la busca por los excelentes y exquisitos trabajos que realiza.

Pero este trabajo tiene un reto y es que quien lo hace debe actualizarse constantemente pues con el paso del tiempo las técnicas cambian, lo mismo que las herramientas e insumos por lo que una pastelera y decoradora no se puede quedar atrás.

En este oficio siempre hay algo nuevo que aprender, porque la variedad de la repostería es infinita ya que en esto la imaginación juega un papel muy importante lo mismo que galletas y los pasteles en donde el toque de quien los elabora queda plasmado, por ese motivo Rosy se ve en la necesidad de documentarse por medio de las redes sociales en cuanto a las actividades que desempeña para estar al día.

Al mundo de la repostería le abrió las puertas estando ya casada y con hijos pues a los quince años contrajo matrimonio plenamente enamorada de hoy su esposo Brigido Véliz con quien formó una familia, Perla, Dulce y Aldo Gamaliel que en todo momento le apoyan y celebran sus logros.

Incluso le apoyan con ideas que bajan de las redes sociales y que le han servido de mucho para perfeccionar su trabajo.

Su fama se expandió aún más cuando fue elegida como maestra del Instituto de Capacitación para el Trabajo en Coahuila, ICATEC en donde los alumnas que tiene a su cargo le aprenden todos los métodos que enseña con gusto.

“Soy una persona que está dispuesta a enseñar gratis los cursos y recetas que sean, con tal de que la gente aprenda y lo haré con gusto siempre y cuando la gente esté dispuesta a poner algo de su parte y todo por el amor que le tengo a mi trabajo, el que venga que tenga ganas de aprender, porque aquí no se necesita dinero para pagar, dijo Rosy.

En el oficio de la pastelería también ha tenido experiencias sobresalientes como es el caso de un pedido de pasteles que le hicieron cuya receta desconocía, pero que para ella fue un reto porque lo hizo y quedó perfecto lo que demostró su habilidad en este arte.

Sin embargo Rosy es una persona ávida de aprender cosas nuevas todos los días y no conforme con dominar técnicas delicadas y exquisitas como las antes mencionadas, aún tiene más aspiraciones como que sus hijas tengan su propio negocio, que le aprendan todo lo que ella sabe, que se hagan independientes y que aprendan aún más de lo que ella les puede enseñar.

Se reconoce como una persona de retos, capaz de enfrentarse a los más capaces en el mundo de la pastelería pues dice que el único requisito que tiene que cumplir es estar preparada y eso lo hace constantemente.

Explica que una de las claves de la autosuficiencia es aprender a hacer con lo que se tenga en la alacena, no excederse, comenzando por lo sencillo y después avanzar, sin poner pretextos de ninguna índole pues está comprobado que se pueden hacer variedades de recetas con solo tener harina, aceite, huevos, azúcar.

Entre sus clientes hay personas de Monclova, Frontera y otras ciudades, pero se debe a las redes sociales que se da a conocer la variedad de pastas galletas y repostería, esto le ha valido que la busquen y valoren su labor.

Aun cuando Rosy dice que ella no cobrará nunca nada por impartir un curso, ella si pagó seis cursos particulares que van desde 650 hasta 2 mil 500 pesos tan solo por un día además de ocho meses en el ICATEC, fue lo que llevaron a la perfección que trasmite a sus alumnas.

Creo que el secreto de que las cosas salgan bien es que nos guste lo que hagamos porque le ponemos todo el amor a la hora de elaborarlos que se refleja y quien lo disfruta siente la buena vibra que trasmitimos.

  • El arte de la pastelería

  • El arte de la pastelería

  • El arte de la pastelería

  • El arte de la pastelería

  • El arte de la pastelería

  • El arte de la pastelería
  • El arte de la pastelería
  • El arte de la pastelería
  • El arte de la pastelería
  • El arte de la pastelería
Artículos Relacionados