CASTAÑOS, COAH.- Fuerte como un roble, así se siente Blanca Idalia Alonso Barrera quien a pesar de tener cáncer que comenzó al detectar una bolita en su seno, está completamente convencida y con fe de que pronto tendrá una segunda oportunidad para seguir viviendo.
Una expresión constante de seguridad mostró la mujer de 57 años de edad durante la entrevista, ella es ama de casa, vive en la zona centro de Castaños; desde hace once meses le dieron la noticia de que tenía cáncer.
Comenzó por detectar una bolita en uno de sus senos, fue a checarse con un médico y luego de unos estudios le informaron que el cáncer era maligno y ya se había extendido a su pulmón, el hígado y la segunda vértebra de su columna.
De inmediato, inició el tratamiento con quimioterapias, “yo era una mujer que tenía mi pelo largo, debajo de los hombros y chino, lo perdí, pero eso no me desanimó trato de ver las cosas de la mejor manera”.
Con una actitud totalmente positiva se encuentra Blanca, quien tuvo cáncer en el seno y se extendió al hígado, pulmón y una
vértebra.
Hoy en día, Blanca ya terminó sus quimioterapias, fue sometida a cirugía, se le extirpó una parte de su seno, se le injertó piel, está por iniciar las radiaciones, dependiendo de lo que diga el oncólogo para iniciar con la última etapa de su tratamiento.
Blanca es ama de casa, tiene una sola hija de 32 años de edad, y su hija sabe que debe cuidarse y prevenir a tiempo el cáncer, “como todas las mujeres debemos hacerlo, pensamos que nunca pasaremos por algo así, pero nadie sabe, en cualquier momento puede suceder, por eso siempre recomiendo a todas que se cuiden”.
Desde que enfermó a la fecha, Blanca decidió mostrar una actitud positiva para salir adelante, “hay gente que le ha dicho a mi hija queremos ver a tu mamá pero no podremos, piensan que me estoy muriendo, pero no es así, tener cáncer no significa que vamos a morir, significa que debemos luchar para salir adelante”.
Añadió “Yo me siento bien, yo por mí hago de cuenta que no pasa nada, me he sentido bien con el ánimo que debemos tener los que pasamos por una situación similar, porque es la única forma que nos garantiza que podamos avanzar”.
Indicó que hace unos días recibió la visita de un grupo de personas de Monclova que según iban a darle ánimos, “Me dijeron que no necesitaba ánimos, que al contrario, servía para darle ejemplo a otras personas que desgraciadamente se decaen al saber que tienen esta enfermedad”.
Con una mirada llena de brillo, una actitud de una sonrisa constante, que por supuesto, mientras recuerda por lo que pasado se aminora un poco, pero regresa de inmediato a ser feliz, al mostrar una actitud completamente convencida de que pronto terminará con su tratamiento y recuperará su salud.
Y mandó un mensaje a todas esas personas que pasan por lo mismo, enfrentar al cáncer, “que le echen ganas, que no se apachurren, quiero decirles a la gente que tiene esta enfermedad porque no pasa nada, que luchen y todo pasará pronto”, finalizó.
