El padre Alfredo Aguilar destacó que es momento de retomar el sentido de las buenas prácticas, ya que la Pascua tiene un significado importante, con un mensaje en el que se pasa de la muerte a la vida, de la soledad a la comunión, y de la vida sin sentido a la comunión con Cristo.
“De las más hermosas prácticas, es el desprendimiento de lo que uno tiene, por ejemplo, a través de la limosna, porque Dios nos ha dado todo en la vida para que nosotros podamos devolverles a otros, de lo mucho que nos ha dado”, agregó.
Agregó que, en la vida, las personas no pueden vivir sin la oración, ya que para quienes creen es similar a la respiración y sin este aliento no es posible vivir, sostuvo.
En el escenario de esta celebración cristiana, cabe mencionar que es el ayuno uno de los símbolos, que tiene el sentido de mortificación de los pecados, para lograr el vencimiento de los obstáculos y la limpieza del cuerpo.
El padre Aguilar, subrayó que esta época es la oportunidad para que aquellos que se han desilusionado y distanciado de Dios, regresen y vean que la vida es bonita caminando en torno de la fe, después de haber sido tentado constantemente.
“Una tentación es una cosa mala, que se presenta como lo más bello a las personas, y a nosotros nos toca tomarla o rechazarla”, ahí se observa el pecado, al que la gente se enfrenta, batalla de donde pude salirse victorioso, apuntó.
