El gobierno de Colorado estableció un programa de "consejería mental" gratuita para agricultores y rancheros agobiados y deprimidos por la decadencia del sector, lo cual ha llevado a muchos de ellos a vender sus tierras y propiedades.
Don Brown,
comisionado de Agricultura del estado, explicó hoy que este
sectorestá
amenazado por los
altos costos de insumos agrarios,
bajos precios de las cosechas y
cambios tecnológicos como el
uso de drones.
A eso se suman las sequías e incendios, además de la falta de suficiente mano de obra, relató durante el encuentro anual del Buró de Granjeros de Colorado.
El funcionario lamentó que los agricultores se ven así obligados a vender sus propiedades, "darle lo que quede al banco y dedicarse a otra cosa".
"Vender la granja de la familia es insoportable", puntualizó el funcionario.
Esta tensión emocional es tratada desde noviembre pasado por consejeros especializados en salud mental de varias disciplinas, así como expertos en tratar a víctimas de abuso, adicciones y depresión, entre otros, en colaboración con la Universidad Estatal de Colorado.
SECTOR EN DESGRACIA
La situación se repite a nivel nacional, tanto que el Instituto Nacional de Salud y Seguridad Ocupacional (NIOSH, en inglés) alertó recientemente que los dueños de granjas y sus empleados son quienes más riesgo corren de morir debido a enfermedades causadas por excesivo estrés.
Los granjeros son el grupo con el más alto índice de suicidios en el país: 90 por cada 100 mil personas, comparado con 13.26 suicidios por cada 100 mil personas en la población en general, según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de EU.
En 2008, el Congreso de Estados Unidos aprobó la creación de la Red de Asistencia a Granjeros y Rancheros Estresados (FRSAN), con un costo anual de 18 millones de dólares. Sin embargo, esos fondos no fueron aprobados al considerarse "gastos innecesarios".
Sin embargo, denunciaron durante la reunión que no existe una línea nacional de salud mental para granjeros.
En Colorado, el Departamento de Agricultura y la gobernación se unieron para entrenar a los consejeros a interactuar con granjeros y rancheros agobiados, según Brown.
El funcionario teme que esta crisis sea más profunda que la que transformó a la agricultura en la década de 1980 y la cual requirió diez años para que el campo volviera a estabilizarse.
Colorado, dijo Brown, carecía hasta ahora de consejeros de salud mental que además "hablen el idioma de la agricultura".
Excélsior