Reforzar las medidas de higiene en casa, sacudir todos los días las camas, evitar la acumulación de ropa y cacharros, son algunas de las medidas esenciales para evitar la presencia de arañas en el hogar y aunque la mayoría no ponen en peligro a la población se debe solicitan atención médica, informó el Instituto Mexicano del Seguro Social.
El especialista en epidemiología Francisco Durán Iñiguez, comentó que el Estado cuenta con una gran variedad de bichos, en su mayoría inofensivos y algunos que sí son de gran peligro como las llamadas viuda negra y violinista o reclusa chilena. Por fortuna en la mayoría de los casos no tienen efectos secundarios es importante solicitar atención médica.
“Ante el ataque o sospecha de alguna agresión de estos bichos, independientemente de que sea o no de los peligrosos, es importante solicitar revisión de especialistas y observar si se presenta alguna evolución o manifestación física a consecuencia de la misma. La vigilancia consiste en verificar desde el sitio de la herida, medirla, revisar el grado de sensibilidad, si existe inflamación, dolor, irritabilidad o avance en la lesión”.
Otros síntomas muy importantes y graves son el adormecimiento del área afectada, dificultad para respirar, abundante secreción de saliva, dilatación en las pupilas, sudoración exagerada, temblor o agitación. Todos estos son indicativos de la inmediata aplicación de suero anti arácnido para combatir el veneno.
Cuando se tiene certeza de que la agresión la provocó una viuda negra, se procede de inmediato a actuar con el medicamento que contrarresta los daños, así como en el caso de la violinista, además del suero especial, se requiere un antídoto muy específico, ya que la evolución se presenta muy rápido hasta atentar contra la vida.
Existen otros tipos de arañas que su toxina solo provoca lesiones locales más que sistémicas y se atienden con un tratamiento moderado. Ante la duda o la posibilidad de algún ataque de estos insectos, se debe recurrir a buscar vigilancia expertos.
“Cuando el deterioro va en aumento con signos de ulceración, secreción o infección, la mordedura de algunos insectos provoca necrosis –muerte del tejido- y en esos casos puede estar en riesgo la parte o extremidad afectada y de no atenderse podría provocar desenlaces fatales”
