LA VIDA DE UN JOVEN LUCHADOR
Hablar de juventud sobre el cuadrilátero es hablar de Obsesión, un joven de tan solo 21 años de edad originario de Monterrey, Nuevo León. Ocho años de experiencia son sobre el cuadrilátero pero de manera profesional tiene 3 años.
Obsesión nos habló de su carrera “Desde muy pequeño mi madre me dejaba viendo la televisión, siempre le cambiaba a la lucha libre, es ahí donde nace mi amor por este deporte, pensé que esta disciplina era muy fácil, como todo prácticas y ya realizas, pero dentro de aquí no.
Es seguir aprendiendo más a diario, mi personaje como luchador espero crezca y esté en el consejo mundial o triple A, he tenido muy buenas ofertas pero por una lesión no me he animado a irme”.
El atleta nos platica cómo surge su nombre luchístico: “Una vez me iba a presentar en la antigua Arena Solidaridad en Monterrey, pero por accidente olvidé mi máscara, entonces Orquídea Negra me dijo ese niño todo chiquito va a ser mi obsesión, entonces el promotor dijo así te pondremos y se me quedó”.
“Ser luchador es una carrera muy difícil, no cualquiera puede salir adelante, pasas hambres, desveladas, golpes, la lucha es muy complicada al inicio, económicamente no completas en tus gastos, si yo tuviera un hijo les diría que no fuera luchador, preferiría que estudiaran y ejercieran una carrera”.
Agradeció enteramente a todos sus seguidores y seguidoras que sin ellos no hubiera podido estar en donde está, espera pronto regresar a la ciudad de Monclova con palabras “Es la afición que más acoge a los luchadores y sinceramente eso es lo que nos hace crecer”.