También comentó que el objeto fue descubierto en 1981 por el astrónomo John Bus de la Universidad de Hawái y en lugar de darle su nombre, como acostumbran los científicos que descubren algo nuevo, el investigador decidió nombrar al asteroide como Florence.

"Él tuvo un gesto bonito porque propuso que el asteroide llevara el nombre de Florence Nightingale, que fue una de las precursoras de la enfermería profesional moderna y que ya murió, pero el astrónomo le rindió un homenaje".

Alejandro Farah explicó que los asteroides están compuestos de elementos rocosos y metálicos, y la teoría más aceptada señala que provienen de la formación del Sistema Solar por lo que "orbitan alrededor del Sol".

"Han caído varios asteroides de relevancia y definitivamente alguno importante va a impactar con la Tierra, es un hecho, no se sabe cuándo, pero sí pasará; lo que ahora es cierto es que no será Florence el que impacte este 1 de septiembre, aunque volverá a acercarse a la misma distancia en el año 2500".