Ciudad Acuña, Coah. - Mientras la ciudad sigue destrozada por los baches, los escasos recursos que hay en la Administración Local para obra pública, se utilizan para mantener a migrantes centroamericanos que han sido, casi invitados por la actual Administración Local.
De hecho, este día los deportistas que utilizan el gimnasio José de las Fuentes ya no lo podrán hacer, ya que será acondicionado para atender a este grupo de cerca de 160 migrantes de varios países sobre todo centroamericanos.
El munícipe ha hecho una invitación abierta a quienes quieran venir a esta frontera a gozar de espléndidas vacaciones, todo pagado con cargo a los acuñenses que a través de sus impuestos serán los que financien, al final estas acciones que solo dejan imagen internacional al munícipe que busca reflectores en otras esferas pero al pueblo de Acuña no le queda nada.
O quizá si la basura que generan día a día la obligación de seguir pagando los impuestos municipales para que se vayan al caño y mientras aquí se trabaja, ellos solo se alimentan y nos crean un conflicto con los Estados Unidos de Norteamérica, que nos ve como los solapadores de esta invasión.
Es grave que se pretenda buscar reflectores internacionales cuando para obra pública de los cerca de 580 millones de pesos, solo quedan 65 o quizá menos y que se estén despilfarrando en mantener a grupos que ni siquiera son de connacionales y solo dejarán graves daños financieros a los acuñenses.
Sumado a la escaza capacidad para gestionar recursos del munícipe, esto pinta para mantener en el municipio a miles de centroamericanos que estarán arribando en oleadas continuas ante la invitación práctica hecha por el alcalde Roberto de los Santos Vásquez en medios regionales.
Si bien la solidaridad es necesaria entre los seres humanos también hay un principio primero los de casa y las necesidades de los locales principio que está siendo desatendido por las autoridades que se prestan al juego de salir en la foto y ponerse en los reflectores internacionales con cargo a todos los acuñenses.
