Las enfermeras son tan esenciales, que su labor es tan valiosa como la de los médicos y son reconocidas porque con su trabajo, esfuerzo y vocación salvan vidas todos los días
Sin duda alguna, la vocación de una enfermera es una de las más satisfactorias profesiones, debido a que las personas dedicadas a ello tienen el orgullo de poder ayudar a quien más necesita para poder salir adelante en cuestiones de salud.
Sin embargo también se sufre al tener este trabajo, pues al ser enfermera y al presentarse la urgencia en personas que integran su misma familia, es cuando la labor se vuelve complicada y hace en ocasiones que decaiga la actitud.
El día seis de enero se conmemora a nivel nacional como el Día de la Enfermera, profesión de gran vocación que inició hace décadas atrás como un oficio y ahora tiene una licenciatura en las universidades más reconocidas.
María de Jesús Guerrero, quien es actualmente es jefa de piso en el departamento de Especialidades comentó, que como desde 21 años atrás cuando inició a desempeñarse como enfermera general hasta el día de hoy, sigue apasionándose con su profesión, donde sin duda ha enfrentado casos que han marcado su existencia.
Dijo que su satisfacción más grande es el ver como los pacientes evolucionan recuperándose gracias a su atención y describió es lo más preciado salvar a un ser humano.
Aseguró que la atención que se le brinda al derechohabiente es de orgullo, pues su trabajo es además de mejorar su condición de salud, el percatarse que el enfermo salga de la clínica estable, bien informado y sobre todo, con las ganas de salir adelante.
Una situación que marcó la vida de la jefa de piso en Especialidades fue dar atención médica a sus padres y hermano, donde ella decidió si seguían luchando con su vida o definitivamente se les dejaba morir.
“Soy muy valiente, pero cuando me tocó atender a mi hermano, fue cuando me hice débil, pero recordé que primero era enfermera y luego pariente. Es muy difícil atender al familiar, porque como enfermera te dejan toda la responsabilidad, fallecieron mis papas y mi hermano y yo tomé la decisión que si se seguía el tratamiento o no para prolongarles la vida, ahí se hace lo mas necesario para su vida”.
Pese a este tipo de situaciones hace seis meses le dieron la base como jefa de piso interina y un mes atrás la nombraron como jefa de piso en el área de Especialidades, ya definitiva.
Otro caso que debe desatacarse es el de la enfermera especialista Silvia Patricia Ramírez de la Fuente, ella tiene 18 años sirviendo en la clínica siente del Seguro Social, se caracteriza por ser un excelente elemento en este nosocomio.
“A mí me gusta servir, el derechohabiente tiene puesta su esperanza en nosotros que somos el personal de la salud, a veces confían mucho en nosotros, hay pacientes que nos cuentan cosas inimaginables y eso es bonito, es lindo que ellos tomen su confianza, porque además de la atención ellos deben de ser escuchados”.
El mayor tiempo dentro del hospital lo ha pasado en quirófano, una de las cosas más satisfactorias es el ver como los bebés vienen al mundo sin complicaciones.
“Es algo muy satisfactorio que nos reconozcan nuestro trabajo, pues con hacer lo que nos gusta, obtenemos el agradecimiento de la gente y de nuestros superiores”, comentó.
Quien tiene 17 años como enfermera en Salud Pública y quien se ha convertido en una psicóloga y consejera de los pacientes es la enfermera Blanca Leticia Castro Iglesias.
“Me gusta mucho cuidar pacientes, tengo una hermana y siempre lo diré, ella empezó a estudiar enfermería y yo seguí sus pasos, estudiamos en la Cruz Roja de Monterrey, ahí las monjas nos ayudaron a atender a un enfermo y esa es la mayor satisfacción que hay, el ayudarse a recuperar la salud de un enfermo”.
Su familia la reconoce al igual que sus compañeros, pues además de brindar la atención en las áreas de Medicina Preventiva mencionó que al ser enfermera ve a los pacientes como a alguien que forma parte de la familia.
Narró que la mayoría de los derechohabientes que acuden llevan carga de estrés y problemas con la pareja, el trabajo además de la salud por lo que siempre se da un tiempo para aconsejar a quien lo requiere.
A veces quieren platicar con alguien, aquí lloran conmigo, platican y cuando se van me dan las gracias, a veces mando a muchos con el psicólogo, el estrés y la depresión está causando muchas enfermedades a las personas, por eso hay que ayudarles”.
Aseguró que de 25 personas, alrededor de ocho tienen problemas de depresión o estrés y eso se detecta en el contacto enfermera-paciente en el consultorio.
“Mi meta es terminar jubilada sin enfermedades ni nada, sobrellevo mi hipotiroidismo, pero mi trabajo me da mucha energía, los problemas los dejo afuera de la casa, aquí vengo a trabajar y servir”, concluyó.
Estas tres destacadas enfermeras, recibirán mañana un reconocimiento por parte de las autoridades del Seguro Social al igual que otras 11 de la clínica 7, además otras enfermeras de las clínicas de las periferia serán conmemoradas en el Día Nacional de la Enfermera.
