El organismo ha alertado que de no atender la emergencia, se podría experimentar otra crisis de hambruna como la experimentada en 2011 en el Cuerno de África.
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó que alrededor de 1.4 millones de niños están en “riesgo inminente” de fallecer debido a la desnutrición aguda experimentada este año por la hambruna que se extiende en naciones africanas como Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen.
A través de un comunicado, la Unicef advirtió que aún hay tiempo para evitar que las condiciones experimentadas actualmente repliquen la tragedia ocurrida en 2011 en el Cuerno de África, cuando se declaró una alerta de hambruna en el mundo.
Sobre el punto, el director del organismo, Anthony Lake aseveró: “aún podemos salvar muchas vidas. La desnutrición severa y la hambruna que se avecinan son en gran parte creadas por el hombre. Nuestra humanidad común exige una acción más rápida. No debemos repetir la tragedia del hambre de 2011 en el Cuerno de África”.
Cerca de la mitad de la población, aproximadamente 6.2 millones de personas, se enfrentan a la inseguridad alimentaria aguda, por lo cual se alerta, necesitan asistencia humanitaria.
El organismo ha indicado que alrededor de 185 mil niños sufrirán de desnutrición aguda severa este año, y se alerta que la cifra presente un aumento de hasta 270 mil infantes durante los próximos meses.
Además estadísticas destacan que el número total de personas con inseguridad alimentaria en Sudán del Sur podría aumentar de 4.9 millones a 5.5 millones en la cúspide de la temporada de escasez en julio si no se hace nada para frenar la severidad y la propagación de la crisis alimentaria.
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