Con un Djaniny Tavares en fuego con un “Hat-Trick”, empañado por errores arbitrales tanto del asistente como del central Luis Enrique Santander, Santos se llevó su primer triunfo en casa al vencer 4-2 a Lobos BUAP, en un partido lleno de vértigo y velocidad en el Estadio Corona, dentro de la jornada inaugural del Clausura 2018.
El nacido en Cabo Verde se llevó la primera noche de domingo del año en la casa del dolor ajeno, porque apenas en el primer juego se apuntó tres goles para el triunfo de los laguneros, mismo que no estuvo exento de la polémica arbitral, ya que el cuarto gol anotado por Carlos Izquierdoz al 56’, debió ser anulado por el árbitro asistente Christian Kiabek Espinosa y por el central Santander, ya que fue marcado en fuera de lugar.