El caso, reportado en medios locales chinos, señala que Zhang Binsheng se cayó de un tercer piso cuando tenía diez años. Al momento del golpe perdió dos dientes, pero sólo habían encontrado uno y no fue sino hasta que le tomaron una radiografía que descubrieron que el segundo diente se encontraba dentro de su nariz.
Desde hace 20 años, Zhang había tenido problemas para dormir y sentía un olor a podrido. Afortunadamente, al encontrar el diente atorado en su nariz, los doctores lograron removerlo en una cirugía de 30 minutos en el Cuarto Hospital Afiliado de la Universidad Médica de Harbin al noreste de China.