Desde hace más de 18 años, Evangelina Salomón agradece a la Virgen del San Juan de los Lagos por los milagros realizados, una danza proveniente de Torreón Coahuila y reliquia para toda la gente que asiste es lo que mantiene viva la tradición.
Es en la colonia Emiliano Zapata Sur, calle Ecuador donde todos los años los integrantes de la familia se preparan con tiempo anticipado, se genera un gran gasto en la comida, pero ni eso impide que la tradición continué.
Los danzantes hacen reverencia al altar que la familia Salomón adorna justo en medio de la calle, esfuerzo, dedicación, pero sobre todo mucha fe y agradecimiento es lo que jóvenes y niños que integran la danza ofrecen a la virgen.
Sigue viva la tradición en casa de la familia Salomón.
Cansancio, frio y dolor muscular se hacen presentes entre los danzantes, pero eso también es parte del agradecimiento hacía la inmaculada concepción.
Los músicos no pueden faltar, es lo que hace diferente a la danza, está el acordeonista, el del violín y el tambor que también tienen mucha devoción a la virgen y que ponen todo su empeño para generar la música de los danzantes.
Gente de San Pedro de las Colonias en Torreón Coahuila viaja a la ciudad para preparar la reliquia, empiezan desde un día antes, la receta para preparar los alimentos pero todo está en “la mano” y el amor con que se preparan los alimentos, es lo que le da el sazón.
Hacen asado de puerco, siete sopas diferentes, además de pozole y frijoles charros, todo hecho en grandes cantidades.
La gente de la zona, esperan con ansias este día, incluso acuden y se forman con sus ollas para llevarse comida a sus hogares y compartirla en familia, esto también es parte de la tradición pues Evangelina Salomón asegura que llevarse reliquia es como llevarse a su hogar las bendiciones de la virgen.
Evangelina Salomón es muy conocida en el lugar y en la ciudad por realizar otro tipo de actividades entre ellas “El castillo del terror” en Halloween, mencionó que el día que ella ya no esté todas estas tradiciones desaparecerán pues así se lo ha pedido a sus 8 hijos, ya que menciona que no sería lo mismo.
Los danzantes hacen reverencia al altar que la familia Salomón adorna justo en medio de la calle.
“Esta tradición nació porque yo le pedía a la virgen y todo, todo me lo concedía, hasta el día de hoy me sigue concediendo, por eso mi agradecimiento con ella, por la salud, por el bienestar que me da a mí y a mis hijos”, comentó Evangelina Salomón.
