FRONTERA COAH.- Integrantes de la familia Del Bosque impidieron que trabajadores con maquinaria pesada ingresaran al rancho “El Papalote”, tierras que aseguran son de su propiedad desde hace más de 50 años y que con escrituras falsas fueron compradas por una constructora a fin de construir cabañas campestres para comercializarlas.
Son 191 hectáreas de terreno la propiedad de la familia Del Bosque, desde hace más de 2 meses parte de este predio fue invadido por la constructora.
Trabajadores de la construcción abrieron camino tumbando árboles, bardas y todo lo que encontraron a su paso, además de limpiar parte del terreno para iniciar con la construcción de las cabañas.
El rancho “El Papalote” colinda con el ejido Pozuelos, ejido Frontera, La Cruz y con el rancho los Moncada, desde 1945 era propiedad de Natividad del Bosque de León y tras su muerte quedó intestado, fue heredado a sus 9 hijos que cuentan con las escrituras.
La familia afectada menciona que la constructora “compró” el predio a Ricardo y Armando Flores, ambos de Torreón Coahuila, quienes portaban escrituras falsas y eso quedó demostrado en el 2009.
Comentaron que en aquel entonces un integrante de la familia llamado Ismael del Bosque, intentó asustar con un arma de fuego a estos dos hombres que querían apoderarse de su predio, Ismael del Bosque fue detenido y liberado al pagar una fianza pero a raíz de esto se inició un proceso legal.
Fue necesario la presencia de un topógrafo y un juez para revisar los planos que tenía la familia Del Bosque y los hermanos Flores, el Juez dio el fallo a favor de la familia Del Bosque pues el plano que portaban los hermanos no coincidía con las propiedades vecinas.
Aún y cuando se determinó que el legítimo dueño de la propiedad era la familia Del Bosque, los hermanos Flores con escrituras falsas vendieron el terreno a la constructora.
Cuando invadieron por primera vez el predio, los integrantes de la familia dialogaron con el abogado de la constructora Jorge Garza y acordaron en que no meterían más maquinaria hasta llegar a un acuerdo y si la propiedad era de la familia la constructora estaba dispuesta a comprar.
Acordaron que en 15 días los integrantes de la familia se pondrían de acuerdo para saber el costo del terreno y qué parte venderían, pero el acuerdo no fue respetado por la constructora y empezaron las labores, la maquinaria ingresó y desmontaron el terreno cortando cerca de 2 mil árboles entre huizaches y mezquites.
“Nosotros le hablamos al licenciado y dijo que habían comprado parte del terreno de Los Moncada, pero están dentro de nuestras tierras, le marcamos y ya no contesta las llamadas, nosotros solo estamos defendiendo nuestro derecho”, comentó Gilberto del Bosque.
“No van a entrar, esto es nuestro desde hace más de 50 años, es injusto que estén invadiendo”, gritaba la familia acompañados de su abogado Abelardo Niño Hernández, cuando impidió el acceso a trabajadores de la constructora que estaban acompañados por un licenciado.
Ahí permanecieron durante algunas horas, esperando a que llegara el licenciado Jorge Garza, pero este nunca llegó.
Al lugar acudieron elementos de la Procuraduría General de Justicia en el Estado, pero no fue por el problema de invasión sino porque recibieron un reporte relacionado a que un hombre que circulaba en una camioneta color gris sin placas portaba un arma de fuego, dicha unidad estaba en el predio, revisaron la unidad y no encontraron nada.
