La Guardia Nacional detuvo una unidad de la línea Frontera en la que se transportaban 43 migrantes que pretendían llegar a Acuña para posteriormente cruzar a Estados Unidos, los centroamericanos fueron enviados al Ministerio Público Federal para rendir declaración y posteriormente a Migración, en tanto los choferes del camión quedaron a disposición de la autoridad federal por tráfico de ilegales.
Alrededor de las 6 de la mañana la Guardia Nacional montó un operativo en el acceso a Castaños, donde detuvieron la unidad 8377 de la línea Frontera proveniente de Monterrey con destino a ciudad Acuña para realizar una inspección y descubrieron que viajaban migrantes.
Había 24 menores entre los migrantes.
Los elementos federales procedieron al aseguramiento de la unidad con placas 84-HA-52, así como los más de 43 pasajeros a bordo y los dos choferes, estos últimos puestos a disposición del Ministerio Público por el delito de tráfico de ilegales.
Alrededor de las 8 de la mañana arribó a las instalaciones del Ministerio Público federal un convoy de elementos de Guardia Nacional, Policía Militar y Federal resguardando la unidad con los migrantes a bordo, todos fueron resguardados en las instalaciones de la dependencia para que rindieran las declaraciones correspondientes, verificar la nacionalidad y posteriormente enviar a Migración a los centroamericanos para que se les brindara la atención médica y asistencia necesaria.
Entre los 43 migrantes resguardados en las instalaciones de la PGR había 24 menores de edad, que junto a sus madres permanecían sentados y otros acostados en el piso en las instalaciones de la dependencia, a la espera de cubrir todos los trámites y declaraciones necesarias.
Tras las declaraciones y verificación de identidades, se corroboró por parte de Migración que eran 43 centroamericanos, 37 de estos provenientes de Honduras entre los que viajaban 4 hombres, 12 mujeres y 21 menores de edad, además de 4 salvadoreños entre los que estaban 2 hombres, una mujer y 3 menores, además viajaban al menos 3 pasajeros más que se comprobó la nacionalidad mexicana y por lo tanto fueron puestos en libertad.
Trascendió que los migrantes abordaron la unidad Frontera 8377 en Monterrey Nuevo León y pretendían llegar a Acuña para posteriormente cruzar a Estados Unidos.
Luego de rendir las declaraciones ante el Ministerio Público Federal, los 43 centroamericanos fueron enviados por Migración hacía Tapachula Chiapas para que regresen a su lugar de origen.
Los migrantes que fueron entrevistados la noche de ayer en las instalaciones de la PGR, indicaron que hicieron un pago aproximado a los 2 mil dólares por persona, mientras que a los niños la tarifa era a la mitad.
Además comentaron que no cederán en su intención de cruzar hacia los Estados Unidos en búsqueda del “sueño americano”, así que harán en un futuro otro intento.
Cabe destacar que entre los niños había bebés de meses de nacidos, y sus padres señalaron que les buscaban una mejor calidad de vida.
