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Coahuila

La columna Por  Dina Flores.

Por Dina Flores - 02 septiembre, 2018 - 11:26 a.m.
La columna  Por  Dina Flores.

Si la Fiscalía pensaba que el caso del elotero que golpearon y casi matan allá en el Municipio de Abasolo  quedó en el olvido pues se equivocaron de lado a lado porque el asunto se puso bueno desde que la doctora que  atendió al herido de gravedad afirmó y firmó que es lo ocurrido fue un delito y que se tiene que investigar.

A casi dos meses que ocurrieran los hechos el afectado quedó mal pero no por la volcadura que dicen sufrió en la carretera sino porque los golpes contundentes que recibió dejaron marcas de que  fue una salvajada lo que le hicieron y que de hecho hubo testigos que por razones desconocidas se niegan a señalar a, o los culpables.

Lo cierto es que la Fiscalía para quitarse uno más de los muchos problemas que tiene y que no resuelve decidió que los hechos ocurridos con el elotero fue mero accidente, dándole carpetazo al asunto, sin embargo el video dice todo lo contrario porque para que lo sepan, hubo quien tomó video del caso demostrando muchas cosas que contradicen a los especialistas en investigación.

El hecho de que la motocicleta en la que viajaba el vendedor quedara parada e intacta a la orilla de la carretera refleja que la agresión iba directamente hacia él, los golpes en la cara y cabeza fueron directos con toda la intención de matarlo, en fin que el caso no es como lo pretenden imponer los de la Fiscalía.

Muchos son los rumores que se escuchan de la salvaje golpiza que recibiera  el comerciante y que incluso involucran a sobrinos de la alcaldesa Herlinda García Treviño, pero a la fecha solo son especulaciones que  de alguna manera se deben aclarar.-

Y pasando a otro asunto, seguimos con el caso de las escuelas primarias públicas que tienen muchas carencias sin resolver dizque porque no hay presupuesto para hacerlo.

Es verdad que los recortes presupuestales se están dando en todas las secretarías y quien sabe a dónde vayamos a parar porque pegan por todos lados, pero cuando se meten en el rubro de la educación las cosas cambian simplemente porque los maestros no se miden a la hora de pedir, pedir y pedir lo que se les pega la gana, en cambio ellos poco hacen para compensar la confianza que les depositamos.

La prueba esta con las condiciones que privan en las escuelas públicas que sin ir tan lejos se tiene el caso de las ubicadas en la Región Semidesértica  que algunas hasta dan ganas de llorar.

Las escuelas están en plena decadencia, para colmo en terrenos que miden más de una hectárea que a estas alturas es difícil de  darles el mantenimiento adecuado lo que lleva a que sean los alumnos o padres de estos quienes hagan los trabajos, eso aparte de comprar los útiles escolares, pagar cuotas, cooperar para los eventos y demás  o sea que todo se los sacamos a los papás para que al final de cuentas salgan con que no se logró el progreso del hijo porque hubo fallas mas nunca reconocen que provienen de ellos.

La sociedad  es la que paga el pato de lo que sucede en las escuelas que en cuanto a infraestructura se refiere son una fatalidad de la que no saldrán tal fácilmente debido a que en su tiempo los responsables no hicieron lo conducente y ahora son los alumnos quienes estudian en medio de una total inseguridad e insalubridad.

No para donde hacerse con eso de que detrás del escritorio los maestros son los que tienen la razón y no hay quien les gane.

Por eso son justificadas las lágrimas de las madres de familia que llevan por primera vez a sus hijos a clase porque desde hace mucho tiempo  que las instituciones educativas dejaron de ser la extensión del hogar.

Dejaron de despertar la confianza de los padres cayendo en incertidumbre y zozobra mientras dura el ciclo escolar.

Que tiempos aquellos cuando libres de toda preocupación los niños corrían por los patios y las calles sin que nadie les dijera nada, cuando los padres no tenían de que preocuparse cuando se iniciaba el ciclo escolar ya que todo comenzaba con un cuaderno y un lápiz.

Hoy tiene que ser hasta con computadora de última generación sino nuestros hijos no aprenden.

Hasta Mañana.

*Los comentarios vertidos en este espacio son responsabilidad exclusiva de quien esto escribe.

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