Un milagro fue lo que salvó de morir a un veloz conductor que a punto estuvo de quedar prensado dentro de su automóvil al estrellarse contra una palma del camellón central del bulevar Pape.
Fue cerca de las 19:30 horas de ayer cuando Miguel Ángel Romero Carrizales, de 32 años de edad, quien dijo vivir en la calle Coahuila, número 1106, de la colonia California en Castaños, conducía un automóvil Chevrolet, Spark, modelo 2017, de color rojo sobre el bulevar en sentido de sur a norte.
Al llegar a la altura de la calle Ecuador de la zona Centro, debido a la velocidad en la que se desplazaba no pudo frenar a tiempo impactándose levemente en la parte trasera de una camioneta Ford, Lobo, color blanca, modelo 2002, propiedad de Abelardo Romero Muñoz, vecino de la calle Zaragoza, número 843, en la zona Centro.
El evitar proyectarse totalmente de frente contra la camioneta ocasionó que volanteara hacia su lado izquierdo, provocando que se subiera al camellón central que divide los dos carriles de circulación, donde detuvo su loca carrera al estrellarse contra una palma, derribándola por completo.
A pesar de lo aparatoso del percance, milagrosamente, Miguel Ángel resultó con lesiones leves que fueron atendidas por socorristas de Cruz Roja, pero debido que no ponían en riesgo su vida, no fue necesario que lo llevaran a un hospital.
Una vez realizado el peritaje correspondiente por parte de los oficiales del departamento de Control de Accidentes se ordenó el traslado de los dos vehículos a un corralón, donde quedaron en resguardo hasta que se definiera la situación respecto a los daños ocasionados.
