Con la derrama económica de la Región Centro es común ver en época decembrina a las llamadas “Marías” en los diferentes lugares de la ciudad como lo son la zona comercial o los distintos cruceros pidiendo a la ciudadanía una moneda para comer.
Desde años atrás las Marías viajaban desde comunidades indígenas a Monclova en donde la derrama económica es mayor debido a la presencia de la empresa Altos Hornos de México y siempre se hacían presentes en el exterior de la planta o en zonas comerciales cuando los obreros reciben prestaciones como el ahorro y aguinaldo.
Esto se ha vuelto toda una tradición, una de ellas se encontraba en el exterior de una pescadería en la calle Hidalgo mencionó que venía del sur del País y que era la primera vez que estaba en Monclova pues tiempo atrás visitó otras ciudades.
Señaló que no es lo mismo que años atrás, pero siguen pidiendo ayuda de la ciudadanía, esto mientras que sus esposos trabajan en puestos vendiendo adornos alusivos a la navidad.
Pero otra de las razones por las que las Marías no obtienen la misma ayuda de la ciudadanía como antes, es por el hecho de que ya no cargan a sus menores hijos luego de que la Pronnif puede interceder en caso de algún reporte ciudadano.
A través de redes sociales desde años atrás circula una publicación en donde se exhorta a los ciudadanos a no seguir ayudando a estas mujeres ya que no tienen prudencia y sin importar el mal clima utilizan a sus hijos para pedir dinero incluso se habló acerca de que los menores eran drogados pues todo el tiempo permanecían dormidos.
Tan solo en el centro de la ciudad andan tres mujeres pidiendo la ayuda de la ciudadanía, pero ninguna de ellas trae a sus hijos y esperan obtener buena ganancia para regresar a su cuidad de origen.
