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Llegó la oscuridad; luto musical y poético

Por Agencia - 11 noviembre, 2016 - 12:15 p.m.
Llegó la oscuridad; luto musical y poético

CIUDAD DE MÉXICO.La muerte se le había anunciado y eso había quedado claro en el espíritu de su último disco You Want it Darker. Y así fue, como una premonición. Leonard Cohen murió ayer a los 82 años, según confirmó el sello discográfico Sony Music Canadá en Facebook.

Más allá del título mismo del álbum, que salió a la venta apenas el mes pasado, el primer tema tiene algo de sagrado, casi del más allá. Sobre todo cuando el poeta del pop murmura “Estoy listo, Señor”.

Desde sus primeros versos”, las letras del cantautor canadiense han abordado con frecuencia el tema de la muerte, apuntó alguna vez The New Yorker. Pero fue en este álbum cuando Cohen reflexionó como nunca antes sobre las despedidas y los abandonos.

Del mismo modo, el blanco y negro de la portada del álbum, en la que mira con escepticismo a través de un marco hacia la oscuridad, se diferencia notablemente de las coloridas portadas de sus trabajos anteriores Old Ideas (2012) y Popular Problems (2014).

Según contó el propio Cohen a The New Yorker, su deteriorado estado de salud le había impedido terminar algunas canciones.

You Want It Darker fue el álbum 14 de estudio de ese cantautor que, tras casi 50 años de carrera, muy recientemente se había declarado “preparado para morir”. “Sólo espero que no sea demasiado incómodo”, dijo.

Desde que debutó en 1967 con Songs of Leonard Cohen, se convirtió en uno de los mejores poetas del pop, por detrás del recién ganador del Nobel de Literatura

Bob Dylan.

Después de recibir el Grammy a la carrera artística en 2010 casi como un regalo de despedida, el cantante, famoso por su voz grave y áspera, lanzó tres aclamados álbumes y realizó varias exitosas giras mundiales.

Cohen siempre compaginó la música con la literatura, su gran pasión, que comenzó a los 16 años cuando escribió sus primeros poemas.

Aún no terminada la carrera apareció su primer poemario, Comparemos mitologías(1956), inspirado en García Lorca, su poeta predilecto, al que siguió La caja de especias de la tierra (1961).

En la década de 1960 se instaló en la isla griega de Hydra, donde empezó a componer canciones, y vivió siete años entre Europa y América.

En 1963 publicó su primera novela, El juego favorito, a la que siguió el tercer poemario Flores para Hitler (1964), su segunda novela Los hermosos vencidos (1966) y el cuarto poemario Parásitos del cielo (1966).

Su obra poética se completa con títulos como La energía de los esclavos (1972), Memorias de un mujeriego (1978), Libro de la misericordia (1984) o El libro del anhelo (2006).

EL ORIGEN

Cohen nació el 21 de septiembre de 1934 en Montreal en una familia de emigrantes judíos que se asentaron en Canadá. Empezó a aprender guitarra de niño y pronto se presentó en bares y clubes, pero durante largos años la música estaría por detrás de su sueño de ser escritor.

Se trasladó a Nueva York con una beca para la Columbia Graduate School, y a los 24 años recibió otra, del Canada Council, para escribir un libro, lo que le permitió viajar a Europa.

Sin embargo, los ingresos que obtenía por sus libros no le alcanzaban para vivir y así fue como, en 1966 entró en el mundo de la música junto al cantante Judy

Collins, quien grabaría dos de sus canciones más conocidas, Suzanne y Dress rehearsal Rag.

En 1967 se presentó en público, fichó con Columbia y lanzó su primer álbum, Songs of Leonard Cohen, al que siguió en 1969 el exitoso Songs from a room y en 1971, con Songs of Love and Hate, se confirmó como uno de los grandes autores.

Durante los años setenta sacó al mercado Live Songs (1973), New Skin for the Old Ceremony (1974), Death of Ladies’ Man (1977) y Recent Songs(1979), y en los 80, Various Positions (1984) y I’m your Man (1988).

Tras cuatro años de silencio, en los noventa publicó The Future (1992) y Stranger Music (1993).

De carácter taciturno e introvertido, Cohen sufrió en varias ocasiones periodos de depresión, de los que salió gracias a la filosofía zen. Incluso estuvo retirado seis años en un monasterio de California, y hasta se convirtió en monje, en 1996, con el nombre de Jikan, “silencio”.

Aun así, en esa época dejó dos álbumes, Cohen live (1994) y el recopilatorio More Best of (1997).

Durante estos años de meditación escribió cientos de poemas y canciones por lo que al salir del monasterio en 1999 preparó su siguiente disco, Ten New Songs (2001).

Tras publicar además un recopilatorio de shows y la colección The Essential, con 31 clásicos, en 2004 salió Dear Heather, un nuevo álbum con el que celebró 70 años. En julio de 2009 durante una gira por España, tuvo que suspender uno de sus concierto al sufrir un desmayo en el escenario.

En 2012, y tras ocho años sin sacar un material, publicó Old ideas, que supuso su renacimiento musical pero cuya causa Cohen no ocultó: estaba totalmente arruinado tras la negligente gestión de su exrepresentante y amiga Kelley Lynch. Lynch durante mucho tiempo estuvo desviando dinero del artista, del que llegó a vender hasta los derechos de autor sin su conocimiento.

Dos años después, y coincidiendo con su 80 cumpleaños, Cohen sacó su siguiente placa de estudio, Popular Problems (2014), donde retornó al blues, haciendo gala de su enorme creatividad.

Cohen fue un gran seductor. En los años 60 mantuvo una relación con la novelista sueca Marianne Jensen —a la que dedicó So Long, Marianne—; después vivió con la fotógrafa Suzanne Elrod —madre de sus hijos Adam y Lorca—, y en los 90 se emparejó con la actriz Rebecca De Mornay.

El amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males”, dijo alguna vez el maestro de la melancolía.

En su discurso con ocasión del Príncipe de Asturias, hizo referencia a la influencia española en su obra, sobre todo por García Lorca y por las enseñanzas de flamenco que le dió un joven guitarrista español que terminó suicidándose, hecho que le marcó.

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