Un vecino de la colonia San Miguel, fue ejecutado a balazos en la puerta de su domicilio por un solitario pistolero que emprendió la huida a bordo de una camioneta cerrada; los violentos hechos activaron el Código Rojo.
El hoy occiso fue identificado por sus familiares como Luis Ángel Juárez Ramos, quien contaba con 34 años de edad y era vecino de la calle Nogales número 1123 de la colonia en mención.
Los sangrientos hechos ocurrieron minutos antes de las 17:00 horas cuando en el Sistema Estatal de Emergencias ingresó el reporte de una persona herida de bala sobre la calle Nogales, activándose con ello la alerta máxima.
Socorristas de Cruz Roja, oficiales preventivos y de la Agencia de Investigación Criminal, así como uniformados de Fuerza Coahuila y del Grupo de Armas y Tácticas Especiales del Municipio se dieron cita en el lugar y acordonaron la cuadra desde las calles Del Manantial con Fresnos luego que los paramédicos confirmaran el deceso de la víctima.
Al enterarse de la tragedia, doña María del Socorro Ramos, madre del hombre que fue ultimado a balazos, se descompensó ante la fuerte impresión, por lo que tuvo que ser trasladada a un hospital.
Asimismo, el delegado regional de la Procuraduría General del Estado Rodrigo Chairez Zamora en compañía del Ministerio Público, Diana Verástegui, arribó a la escena del crimen en compañía del personal de Servicios Periciales, quienes se encargaron de fijar las evidencias y asegurarlas.
Varios casquillos .9 mm fueron encontrados como evidencias en el exterior e interior de la vivienda y a escasos pasos de la puerta yacía el cuerpo sin vida de Luis Ángel, a quien según los vecinos apodaban “El Tato”, quien por lo menos tenía un impacto de bala a la altura del estómago.
Minutos más tarde, arribaron oficiales del Ejército Mexicano para tomar conocimiento de los hechos.
ASESINO HUYÓ EN CHEROKEE
Asimismo, testigos de la tragedia indicaron a las autoridades municipales que observaron cómo un tipo llegó a la casa de Luis Ángel, quien horas antes había estado podando una mora y abrió fuego en su contra para luego huir caminando hasta la calle Del Manantial, donde ya era esperado por una camioneta Grand Cherokee de color roja, en la que se retiró a toda velocidad.
Luego de realizar las diligencias correspondientes, las autoridades ordenaron el traslado del cadáver a una funeraria de la localidad, donde practicarían la necropsia de ley correspondiente para determinar cuántos fueron los impactos que recibió la víctima.
‘CREÍAMOS ERAN CUETES’
Ante el fuerte despliegue policÍaco, los vecinos del sector indicaron que escucharon las detonaciones pero creyeron que eran cuetes, hasta que
oyeron las sirenas y se perca-
taron de la presencia policÍaca.
