Contactanos

Coahuila

Lucero siempre fuerte contra el cáncer

Mónica Meza
Por Mónica Meza - 09 agosto, 2019 - 01:40 a.m.
Lucero siempre fuerte contra el cáncer
“Me he acercado mucho más a Dios, es difícil pero tengo a mis hijas chiquitas.

El optimismo es la mejor medicina que tiene para luchar contra el cáncer, su fe en Dios ha incrementado, no le teme a nada y enfrenta esta dura batalla por el amor a su familia, Lucero Guadalupe López Mijares es una mujer fuerte que día a día se reconstruye.

Dicen que no hay mujer más fuerte que la que confía en Dios, Lucero tiene mucha esperanza y fe en que Dios la va a sanar para seguir disfrutando del amor de sus dos hijas y su esposo quien la sigue amando como el primer día y que tomado de su mano, enfrenta con ella está lucha.

Tiene 28 años de edad y jamás imaginó pasar por esto, apenas hace poco tiempo su esposo que tenía su cabello largo había decidido cortarlo y donarlo para personas con cáncer sin pensar en que poco después su esposa tendría que enfrentar este mal.

“No sé cómo le hago para estar tan fuerte, es por mis hijas”.

En febrero sintió una bolita en su pecho izquierdo, fue con una ginecóloga, al principio pensaron que se trataba de mastitis porque estaba amamantando, estuvo en un tratamiento, pero el 4 de mayo le diagnosticaron cáncer de mama.

Según la biopsia, le diagnosticaron el cáncer en etapa 3, “no sé si decir que está a tiempo de ser tratado pero…”, señaló Lucero quien porta un turbante en la cabeza, tiene una enorme sonrisa y unos ojos que reflejaban paz, tranquilidad y confianza.

Le retiraron el seno para frenar la enfermedad, fue todo una semana con dolores muy fuertes, quería que se acabara el día, pero la noche le desesperaba porque no podía dormir, hasta este momento no duerme acostada totalmente.

Pasó un mes y medio desde que le extirparon el seno, después de esto inició la quimioterapia, ‘fuerte siempre fuerte’ posteaba en sus redes sociales un poco de lo mucho que vive y a cambio recibe los ánimos, las bendiciones de su gente, su familia, sus amigos.

Tiempo atrás él se había cortado su cabello largo para donarlo a personas con cáncer.

Luego vinieron los estragos de la quimioterapia a la que describe como una montaña rusa, no come, si bien le va duerme, porque a veces ni eso, pasa una semana y poco a poco empieza a recuperarse, ya se siente mejor, a la segunda semana se siente más fuerte, se recupera y quiere hacer lo que no podía.

Durante una revisión le dijeron que el cáncer regresó a donde mismo, pero aparentemente las quimios están funcionando, en el lado de la herida estaba abultado y luego de dos quimioterapias la inflamación ha disminuido, para los médicos es una buena señal.

“Me he acercado mucho más a Dios, es difícil pero tengo a mis hijas chiquitas”, comentó Lucero sin pensar en que pasará, en el futuro, simplemente viviendo el presente.

Toda su familia y decenas de amigos la están apoyando y de alguna manera han alimentado su alma de energía, de ganas de luchar cada vez más fuerte, siempre fuerte.

“No sé cómo le hago para estar tan fuerte, es por mis hijas, creo que si me pongo a pensar mucho en eso voy a irme para bajo”, comentó.

Que le hayan extirpado un seno no le afectó, tampoco verse en el espejo con un turbante en la cabeza, a pesar que durante toda su vida su cabello fue largo, ese que ahora le pertenece a alguien que cruza por la misma enfermedad.

Sabía que iba a perder su cabello, que se le iba a caer poco a poco y que podía servir para elaborar una peluca para alguien más, así que decidió cortarlo y donarlo, lo que su esposo había hecho tiempo atrás. Al principio se preguntaba ¿Por qué le tocó a ella?, pero después, fue como instalarse un chip en la cabeza, un dispositivo que le permite mantenerse positiva, así como se lo dijo una doctora, que el positivismo era indispensable para esta batalla contra el cáncer.

Enfrenta el cáncer de manera positiva por su familia.

“En verdad no pienso mucho en lo que tengo, hay ratitos malos, que he llorado y me da un poco de miedo, pero han sido pocos, no quiero tener mi mente en eso, no pienso en negativo, no quiero pensar que dejaré a mis hijas solas”, comentó.

Recuerda mucho el caso de Eddy Fuentes quien luchó siempre con optimismo y que nunca se rindió, por eso se mantiene positiva, porque sabe que una actitud negativa no la va a curar y sabe también que es dueña de su estado de ánimo.

“La esperanza es la última que muere”, sonríe Lucero, al tiempo que su esposo Edgar Alejandro Reyna Ortiz contesta “Yo la sigo viendo igual de hermosa”, al tiempo que se acerca a ella y le da un beso.

Al iniciar este proceso, Lucero López no estaba afiliada al IMSS porque su esposo se había ido a Estados Unidos, fue un jueves cuando le dijeron que había que extirpar el seno y para el sábado ya la habían programado, no la pensó lo hizo en particular, fue un costo de 42 mil 500 pesos deuda que todavía tienen.

Por ello se realizará un evento con causa el día jueves 15 de agosto en La Tarola, habrá show comedia, karaoke e imitadores, el costo es de 50 pesos, interesados en apoyar pueden comunicarse al 866168 02 75 con Lucero López.

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer

  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer
  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer
  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer
  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer
  • Lucero siempre fuerte contra el cáncer
Artículos Relacionados