La Profesora Luz María Aguilar es un icono de la Secundaria 1 “Juan Gil González” y el CecyTec Monclova Norte “John F. Kennedy”
¿Quién no sufrió de nervios por pasar la materia de física con la profe Luz María Aguilar? pero al final lo disfrutó y algunos hasta la exentaron, ella es un ícono de la Secundaria 1 de Monclova “Juan Gil González” y el CecyTec Monclova Norte “John F. Kennedy”.
Empezó su carrera como técnica laboratorista en 1977 egresada del CECYT 179 que ahora es CBTis 36, trabajó después en la Secundaria 1 unos años dando clases en la especialidad de laboratorio y luego se fue a estudiar a la Normal Superior de Tampico, Tamaulipas.
Cuando inició su carrera ya tenía a dos de sus seis hijos pero aún así no desistió, trabajaba todo el año y estudiaba el verano en la Normal, así lo hizo seis años hasta terminar y obtener su título de Licenciatura en Ciencias Naturales con especialidad en Física, Química y Biología
Inmediatamente después de concluir con sus estudios superiores, se le dio la oportunidad de tener horas frente a un grupo en la Secundaria Juan Gil González, ahí trabajó 29 años hasta que se jubiló en el año 2006.
Al CecyTec Monclova Norte llegó en 1997 por un semestre dio clases de química y después se ha dedicado a enseñar la materia de física, al día de hoy ya tiene 23 años en esta institución, es una de las orgullosas fundadoras.
“Han pasado muchas generaciones y a veces me encuentro a alumnos que ya están grandes, recuerdo sus caras pero sus nombres es casi imposible, solo me acuerdo de los más inteligentes o más traviesos, aquellos con ciertas características”.
“Me da satisfacción que me recuerden y les haya gustado la materia porque como doy física, pues a muchos no les atrae y les parece sumamente difícil, pero a veces de un semestre a otro cambian, empiezan muy flojos pero terminan siendo de los mejores”.
Para un maestro dijo, lo más satisfactorio es que los alumnos se apasionen por aprender lo que ellos enseñan y sobre todo que le entiendan a la física. “Siempre me han gustado mucho las ciencias exactas pero la vida me fue llevando por la física y he sido muy feliz”.
Son pocas personas las que saben, pero la maestra Luz María Aguilar nació en la Ciudad de México, “cuando me preguntan de dónde soy siempre les digo que de Monclova porque he vivido toda mi vida aquí, pero realmente nací allá junto con mis cinco hermanos”.
Una de las anécdotas que más recuerda es la de un alumno muy inquieto “el jovencito terminó su trabajo de biología y molestaba a los demás, lo mande con el prefecto por unos tones, se regresó y me dijo que no tenía luego le digo que le pidiera un “tenme aquí” volvió y dijo que tampoco había, así se quedó y me lo volví a encontrar muchos años después, al verme me dijo maestra ya sé que es un “tenme aquí” y me sonrió”.
La principal característica de la profe LuzMa como la conocen, es hacer que los estudiantes piensen, no darles todo ya hecho. “Me gusta pedirles una investigación y luego que la expongan ante el grupo, que demuestren que entendieron que la física no es una materia más, sino que tiene muchas aplicaciones en la vida diaria”.
Asegura que en lo personal las tecnologías como el internet no han sido un enemigo suyo, sino más bien una herramienta que se ha vuelto fundamental para que los jóvenes aprendan más rápido porque antes si no tenían el libro no hacían nada.
Tiene ya 40 años al servicio de la educación y aseguró que si Dios se lo permite el año entrante se retirará, “voy a cumplir 60 años, la verdad es que físicamente estoy muy bien, con muchas ganas de seguir pero hay que darle oportunidad a los nuevos docentes”.
“Aunque uno no quiera con él paso de los años se nos va agotando la paciencia y nos vamos haciendo más estrictos, así que lo mejor es enfocarnos en nuestra vida personal, pero agradecer por la oportunidad de servir tanto tiempo a los jóvenes”.
A parte de enseñar la materia de física, otra de las cosas que más le apasionan es viajar y asegura que afortunadamente ha tenido la oportunidad de conocer casi toda la República Mexicana, además de cocinar, tejer y convivir con sus amigos.
Han pasado muchas generaciones y a veces me encuentro a alumnos que ya están grandes, recuerdo sus caras pero sus nombres es casi imposible, solo me acuerdo de los más inteligentes o más traviesos, aquellos con ciertas características”.
Me da satisfacción que me recuerden y les haya gustado la materia porque como doy física, pues a muchos no les atrae y les parece sumamente difícil pero a veces de un semestre a otro cambian, empiezan muy flojos pero terminan siendo de los mejores”
Aunque uno no quiera con el paso de los años se nos va agotando la paciencia y nos vamos haciendo más estrictos, así que lo mejor es enfocarnos en nuestra vida personal, pero agradecer por la oportunidad de servir tanto tiempo a los jóvenes”
Siempre me han gustado mucho las ciencias exactas pero la vida me fue llevando por la física y he sido muy feliz”
