Brasil.-Una pequeña bebé de 7 meses terminó por sobrevivir de milagro a una caída de 35 metros de altura, después de que su propia madre la arrojara de un puente; se dice que padecía problemas de salud mental y que el acto fue un arranque provocado por sus síntomas.
La mujer fue identificada por las autoridades como Carla Regina Mendes, de 23 años. Fue el pasado domingo que Carla recorría el puente José Sarney, ubicado en Sao Luis, hacia el noreste de Brasil, cuando viandantes atestiguaron el impactante momento en que la mujer se deshizo de la pequeña que hace segundos antes llevaba en brazos.
Por suerte para la pequeña, dos oficiales que estaban fuera de turno en ese momento, notaron el escándalo provocado por los testigos de la acción y acercaron a ayudar. Ambos, intrépidamente, caminaron por el lodo con el solo objetivo de revisar si la bebé seguía con vida, casi cubierta totalmente de barro hasta la cabeza.
El bebé llevaba la boca cubierta de fango pero quebró en llanto cuando sintió la presencia de ambos oficiales. Fue llevada de inmediato a un hospital donde fue declarada estable y sin heridas graves a pesar de la altura del puente. No hubo huesos rotos y sólo unos cuantos moretones.
Los dos oficiales Danilo Pestana Pinheiro y Herbert de Jesus Silva Barro, quienes rescataron a la bebé, fueron condecorados por su valentía y servicio, reporta Portal AZ, un medio local de Brasil, según narra el portal La Tribuna.
Por otra parte, reporta MA10 que la madre fue detenida y hasta el momento se le han realizado varias pruebas psiquiátricas para determinar su estado de salud mental, que, según familiares, siempre ha sido malo y empeoró después de ser internada a un hospital en 2017.