La disciplina del taekwondo es una rama de las artes marciales que no cualquiera se anima a practicar, deporte de mucha entrega, responsabilidad y sacrificio es considerado también un estilo de vida, tal es el caso de Wendolyne Yvonne Domínguez Rodríguez de 43 años, conocida entre sus amigos como Wendy, se acercó al deporte en el año 2015 esto luego de que sus hijas Loretta y Mariana de 10 y 8 años comenzaran a practicar el deporte.
Un año después de estar asistiendo junto a su esposo Mario Cervantes apoyando a sus hijas tomó la decisión de entrenar en un doyang, su idea era solo hacer la disciplina sin pensar que a los tres meses de estar en la escuela de Taekwondo Argentum, presentó su primer examen, un año después tuvo un embarazo y al final suspendió un año sus entrenamientos, mientras ella esperaba por regresar a la escuela, tuvo que esperar la autorización de su doctor para regresar en lo que se convirtió su estilo de vida.
Lo complicado en sus inicios
Al inicio para mí lo complicado fueron los horarios ya que, por ser una persona adulta, tengo el último horario en la escuela, me es complicado ser profesionista, ama de casa, esposa, madre de tres hijas en edades de 15, 13 y 3 años, además de ser deportista de taekwondo, para poder entrenar tengo que dejar todo listo en casa para después llegar como eso de las 9:00 pm.
No ha tenido un combate
Solamente practico el deporte, pero si me ha pasado por la mente estar en un combate, quiero saber que se siente estar en el tatami, sentir esa adrenalina que mis hijas sienten cuando están en combate.
El trayecto de ser cinta blanca a cinta negra
Fue muy complicado, pero no imposible, ser madre, esposa, taekwondoina es difícil, recuerdo mucho que mi hermana me decía a qué vas a entrenar andas muy cansada, hiciste muchas cosas en el día, pero solo respondí voy porque me gusta y ahí se va todo el estrés del día.
Ahora estoy contenta el ver orgullosas a mis hijas, mi esposo Mario Cervantes, ahora sé que les encanta decir mi madre, mi esposa es cinta negra en taekwondo.
La recomendación de Wendy
Yo siempre he recomendado practicar este deporte para un adulto porque se libera el estrés, además que ayuda a tener una buena condición física, ejercita la memoria, te da una defensa personal, disciplina, respeto y seguridad con uno mismo.
La experiencia de vivir un examen
Me sentía nerviosa por no saber lo que me iban a poner, solamente pensaba, yo sé que puedo, he entrenado mucho para obtener mi siguiente cinta, así que me tranquilizaba y terminaba mi examen.
“Finalmente quiero darle gracias a mis hijas y esposo por el apoyo que me dieron para llegar a ser cinta negra, regañándome algunas veces cuando de plano decía hoy no puedo, gracias a mi sabonim Jorge Puente Romo por darme siempre palabras de aliento para continuar por el camino del taekwondo, así como a Maely su esposa, sus hijas, Yulieth, Monse y Yoselyn, por enseñarme todo lo que ellas saben y también por cuidarme muchas veces a mi niña Larissa de 3 años para poder entrenar”.
