CIUDAD DE MÉXICO.
Astrónomos del país descubrieron una de las galaxias más antiguas detectadas hasta ahora, la cual surgió cuando el Universo conocido tenía apenas 900 millones de años.
Si bien no es la galaxia más vieja encontrada en la actualidad, se calcula que surgió cuando el Universo tenía menos de un quinto de su edad actual.
Se trata de G09 83808, que fue avistada por un equipo de especialistas encabezado por Jorge A. Zavala y David Hughs, del Instituto Nacional de Astrofísica Óptica y Electrónica (INAOE), y Vladimir Ávila Reese, del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Hoy en día es posible ver
galaxias elípticas, espirales o irregulares, pero en el pasado no eran así. La luz que nos llega de ellas recorre una distancia muy larga hasta nosotros, pero con tecnologías de frontera es posible ver cómo eran estos objetos.
Información del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT) precisa que los astrónomos
mexicanos develaron la naturaleza de una galaxia a 12 mil 800 millones años luz de distancia, con ayuda del Gran Telescopio Milimétrico en México y el ALMA de Chile.
Una investigación publicada en la revista
Nature Astronomy, encabezado por los científicos Jorge A. Zavala y Alfredo Montaña, del del INAOE refiere que la nueva galaxia descubierta se estudió con el Gran Telescopio Milimétrico Alfonso Serrano (GTM) en la Sierra Negra, Puebla.
Los expertos explican que, en realidad, la luz de las
galaxias récord más lejanas que se han observado se generó cuando el Universo tenía cerca de 500 millones de años. Estas
galaxias embrionarias emiten principalmente el ultravioleta por las estrellas nacientes que tienen.
Pero hay
galaxias del pasado, cuya emisión se da principalmente en longitudes de onda más largas y energías más bajas, como es el caso de G09 83808. Éstas tienen intensos brotes de formación estelar, capaces de producir por completo a las estrellas en pocos millones de años, y su radiación absorbida por el mismo es entonces reemitida en el infrarrojo/submilimétrico.
Detallaron que el polvo de la galaxia calentado por una enorme cantidad de estrellas jóvenes produce una radiación submilimétrica. Dichas
galaxias, con los brotes más intensos de formación estelar, fueron descubiertas justamente en el submilimétrico. Son enormes monstruos del pasado que forman miles de veces más estrellas por año que nuestra galaxia, y actualmente y producen enormes cantidades de polvo. No obstante, estos objetos galácticos, producto de grandes colisiones, son extremadamente raros y se cree que sus descendientes son las
galaxias elípticas masivas del Universo.
Lo peculiar de G09 83808 es que resultó ser no tan colosal.
Su tamaño y tasa de formación estelar es más normal y en realidad no se le habría descubierto, de no ser porque su luz se amplificó casi diez veces por un fenómeno llamado lente gravitatoria. Los autores del artículo comprobaron esto con observaciones de alta resolución angular en el Telescopio ALMA, en Chile.
“Es una galaxia única, la más lejana en su tipo y no esperábamos que pudiera existir en esas épocas”, precisó Ávila-Reese al FCCyT.
El investigador, junto con Aldo Rodríguez-Puebla, también del Instituto de Astronomía de la UNAM, desarrollaron un escenario empírico de evolución de
galaxias. El mismo se construyó con las observaciones de éstas desde hace 13 mil 300 millones de años hasta el presente.
En este escenario, publicado en la revista
Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, se pueden conectar a nivel estadístico las poblaciones de
galaxias de diferentes épocas y así saber qué tipo de
galaxias son las descendientes de las más lejanas.
Si resulta que hay más
galaxias del tipo y tamaño de G09 83808 en épocas tan remotas, será entonces un desafío entender qué población de
galaxias son elementos químicos pesados de los que se forma el polvo cósmico. El polvo cubre por completo a las estrellas y su radiación absorbida por el mismo es entonces reemitida en el infrarrojo/submilimétrico.