Un proveedor de productos para bebés, murió en el interior de una farmacia ubicada a un costado de la sala de urgencias de la Clínica Siete del Seguro Social, al sufrir un infarto cuando estaba surtiendo mercancía.
A pesar de que una cliente salió a pedir auxilio médico en Urgencias del Seguro Social, se negaron a acudir argumentando que no había personal disponible.
El hoy occiso fue identificado como Carlos Pérez Guerra, quien contaba con 79 años de edad y vivía en la calle Nevado de Toluca, número 225, de la colonia Los Bosques.
El deceso ocurrió la tarde de ayer, cerca de las 14:00 horas cuando el proveedor llegó a dejar mercancía a la Farmacia San José, localizada en la esquina conformada por la calle De la Fuente y Guatemala de la colonia Telefonistas, a bordo de una vagoneta acompañado de su esposa.
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Las empleadas pidieron auxilio en la clínica siete del IMSS, pero el personal argumentó que no había médicos ni enfermeras disponibles.
El septuagenario bajó con las cajas de sus productos para el cuidado de bebés y cuando los acomodaba en los estantes se desplomó ante la mirada de empleadas y clientes de la farmacia.
Con la sala de Urgencias a menos de 50 metros, clientes de la farmacia no dudaron y salieron corriendo a pedir auxilio, pero el personal del nosocomio se negó a salir del lugar.
Argumentaron que no había médicos, enfermeras y ni siquiera camillas disponibles, ignorando las suplicas de la cliente de la farmacia que salió en busca de ayuda.
Se llamó a los cuerpos de auxilio y de seguridad, arribando minutos después policías preventivos quienes confirmaron el deceso del proveedor y acordonaron el área, cerrando el acceso a la tienda.
Elementos de la Agencia de Investigación Criminal llegaron a la farmacia acompañados de Servicios Periciales que ratificaron el deceso y ordenaron el levantamiento del cuerpo del hombre que falleció sin atención médica, a pesar de encontrarse tan cerca de un Hospital.
