“Yo solo quería pertenecer a un equipo, cual fuera, como todo pelotero el sueño era llegar a lo grande, no lo fue así, los juegos de la vida son duros, estar dentro del terreno de juego lleno de emoción y nervios son sensaciones que no cambian, no importa en qué campo o liga sea, lo importante es tomar la pelota con el guante y darle duro con el bate, yo nací para jugar al beisbol”, explicó Édgar Banda Rodríguez, un gran talento dentro del beisbol.
Originario de Monclova Coahuila, sus padres Héctor Javier Banda Romo, Elvia Rodríguez Ontiveros, de tres hermanos Héctor Javier, Joel Adaair, Enrique Antonio.
Desde muy pequeño Édgar Banda se enamoró del beisbol ya que desde muy pequeño el asistía a los parques de pelota con su padre para presenciar los juegos de su hermano mayor, a partir de ahí creció su interés por tomar un bate y una bola de beisbol para ser un pelotero, lo que ahora es su más grande amor, pasión y un estilo de vida diferente.
Sus estudios quedaron truncos luego de que por el talento con el cual destacaba fue llamado por diferentes organizaciones del beisbol, como deportista nato siempre fue muy competitivo y vivía con grandes ganas de pisar el diamante de juego.
Mientras el dejó todo de lado por enfundarse en el deporte de la pelota caliente, tenía esa ambición y finalmente logró realizar los trainings con las organizaciones de Acereros del Norte, Saraperos de Saltillo, el más reciente fue con la novena verde Pericos de Puebla en 2016.
Las cosas no se le dieron para llegar lejos, “recuerdo bien como me sentía al pisar esos terrenos de juego sintiéndome como los grandes, tal vez alguna falta de constancia o aplicación no me ayudó pero nunca desistí´´.
Logró participar en liga invernal de México donde participan los prospectos de liga mexicana, al no poder pisar el circuito grande de la LMB en un debut oficial, Édgar Banda nunca se dio por vencido y siguió luchando por desarrollarse como profesional.
A sus 21 años Édgar Banda Rodríguez sigue esforzándose y luchando por ser un buen pelotero, de las mayores satisfacciones fue poder estar con diferentes organizaciones, de lo más actual es que formó parte de las filas de Rieleros de GIMSA.
Ahí tuvo la oportunidad de enfrentarse con grandes peloteros, además de conseguir ser dos veces campeón en tan importante equipo. A su salida del riel ahora forma parte de las filas de Tuzos de Palaú en la liga del Norte de Coahuila.
Gracias a su esfuerzo y dedicación “Bandita” sigue en el circuito grande de Coahuila, de igual manera alterna entre semana en diferentes ligas de Softball de primera fuerza, además de jugar en la liga departamental de beisbol dentro de Altos Hornos de México, donde se encuentra laborando actualmente.
¿A qué organización te hubiera gustado pertenecer si te dieran la oportunidad?
“A los Acereros del Norte”.
“ Pisar el terreno de juego me relaja, es algo maravilloso, me emociona como la primera vez que jugué, cada actuación que tengo dejo todo en el diamante como si fuera mi último día ahí, estando en el cajón de bateo es indescriptible sentir toda esa adrenalina y tratar de que todo salga bien”.
Agradezco a mi familia en especial ya que sin ellos no hubiera podido lograr muchas de las cosas que hago hoy, a los jóvenes que hoy en día quieren entregar todo en el beisbol, les puedo decir que luchen por sus sueños, esos mismos pueden hacerse realidad al ponerle el empeño que se debe y que todo sacrificio tiene su recompensa”.
