El agregado de la Embajada de Honduras en México, Carlos Ponce, declaró ayer que en relación con la nueva caravana de hondureños que se aproxima a la frontera y a pesar del buen trato que recibieron en Piedras Negras los mil 677 migrantes de la anterior caravana, lo mejor es que se dirijan a otros estados de México, por la poca posibilidad que tienen de asilo político en Estados Unidos desde aquí.
Asimismo aclaró que muchos de sus compatriotas no huyen de la violencia en su país, sino que anhelan reunirse con sus familias en la Unión Americana o encontrar mejores oportunidades de trabajo.
“Sabemos que más migrantes están en México, y tenemos que buscar la protección consular para que sean bien atendidos en caso que vinieran a Coahuila o Piedras Negras”, señaló.
En ese sentido consideró como bueno el trato humanitario que Coahuila y el municipio le brindaron a sus compatriotas, aunque ello les corresponde decirlos a sus connacionales.
“Algunos dijeron que fue bueno, otros que malo, pero lo importante es que no hubo personas fallecidas ni secuestradas o privados de su libertad por el tema de la seguridad”.
Por otra parte Carlos rechazó que la violencia obligue al éxodo de personas de su país, algo que dijo no está autorizado a comentar, sin embargo que se está trabajando en ese tema y lo más importante es que “no están huyendo de la violencia en Honduras, sino para encontrarse con sus familiares en Estados Unidos o trabajar”.
Ayer observó cómo partió el último grupo de migrantes del Albergue ubicado en la vieja fábrica de Macesa.
