Los piecitos de una pequeña fueron quemados con agua hirviendo por su abuela, ocasionándole ampollas y quemaduras de segundo grado.
El lamentable hecho ocurrió el pasado 11 de agosto, cuando la madre de Kaylee Robinson, de 2 años, Brittany Smith, dejó encargada a la menor con su abuela, Jennifer Vaughn, (madre de su pareja), en su casa, ya que ella y sus otros hijos salieron a nadar.
La madre de Kaylee informó que no se llevó a su hija porque era un lugar profundo y le daba miedo que algo le pasara a la niña en la alberca.
Y por eso decidió dejarla con Vaughn, quien había cuidado a la niña sin incidentes en múltiples ocasiones.
Antes de llegar a recoger a la pequeña, Brittany recibió una llamada telefónica en donde Vaughn le decía que llegara por Kaylee.
Al llegar a la vivienda, la abuela le dijo que estaba bañado a la menor pero como se estaba portando mal sumergió sus pies en agua hirviendo.
Trasladaron urgentemente a la niña al hospital, donde continúa recibiendo tratamiento por sus heridas.
“No podrá caminar en el futuro previsible, y realmente está luchando por entender por qué no puede unirse a sus hermanos cuando los ve jugando en el hospital”, señaló Brittany.
Finalmente, Vaughn ha sido acusada de abuso infantil agravado y está detenida con una fianza de 150 mil dólares.
