La Dirección de Protección Civil del Estado confirmó ayer que no fue un tornado, sino una tormenta severa o tromba lo que impactó a Piedras Negras, Allende, Nava y Villa Unión la madrugada del domingo 7 de abril y que dejó cuantiosos daños materiales aunque no muertos ni heridos.
Aclaró sin embargo que sí hubo varios vórtices, pero ninguno tocó tierra, como se publicó en redes sociales.
El sistema comenzó en la serranía Santa Rosa, hacia el noreste de la sierra El Burro, en la Región Carbonífera.
El meteoro se desplazaba hacia Nuevo Laredo, pero cambió su recorrido hacia esta región.
Los vientos fueron de hasta 120 kilómetros por hora y hubo granizo en algunas partes y lluvia de fuerte a intensa.
Protección Civil reiteró que hubo algunos vórtices de tornado durante el desplazamiento de la tormenta hacia las regiones Carbonífera y Norte, pero dijo que no todos los vórtices tocan tierra y su tiempo de duración va de segundos a minutos, como sucedió en Ciudad Acuña en mayo de 2015.
