MÉRIDA.
Debe quedar claro que Andrés Manuel López Obrador “es partidario del Estado laico” y que la constitución moral que defiende busca fortalecer los principios y valores para evitar que la violencia y la desintegración familiar avancen en el seno de la sociedad mexicana.
Por lo que nadie debe confundirse con la idea de “moralizar al país” dado que la honestidad, el bien material, el amor al prójimo y los buenos ejemplos atañen a religiosos y no creyentes, destacó el candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia ayer, luego de sostener un encuentro privado con militantes de Morena en Mérida, Yucatán.
“Los principios, los valores, atañen a creyentes y no creyentes, no importa (si se es o no religioso). Claro, que haya honestidad, respeto, amor al prójimo. Jesús fue el primero que dijo ‘al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios’; yo soy partidario del Estado laico, que quede claro, pero es muy importante fortalecer valores en el país; no sólo de pan vive el hombre”, dijo ante los medios de comunicación.
De acuerdo con López Obrador, como a sus oponentes políticos “nada les gusta” y no conocen de historia, de inmediato descalifican sus propuestas sin saber que desde antes del cristianismo la honestidad y el bien común ya eran reconocidos como valores y que en México, por ejemplo, un liberal del siglo pasado, Alfonso Reyes, propuso una cartilla moral.
Descartó en seguida que pretenda modificar la Constitución mexicana con ese propósito.
“Lo que pasa es que andan muy nerviosos y todo les preocupa, no es modificar el Estado laico ni modificar la Constitución actual”, sentenció al criticar que alguien pueda oponerse a los buenos comportamientos o ejemplos de vida.
De ahí que recomendó a sus adversarios del PRI, José Antonio Meade, y al del PAN, Ricardo Anaya, cambiar de estrategia y mejor dedicarse a otra cosa porque, a la fecha, “uno no levanta y el otro está manchado de corrupción”.
“Un consejo no se le niega a nadie, ahí tienen a (Aurelio) Nuño que está en posibilidades y también le diría a los machucones que cambien al (candidato) del PAN, porque está manchado de corrupción y seguramente van a salir más cosas; entonces podrían cambiarlo todavía al del PAN, ahí está Diego (Fernández de Cevallos), es mejor el maestro que el alumno”, sugirió.
López Obrador acudió a Mérida acompañado por sus hijos Andrés Manuel y Gonzalo López Beltrán.
