La noche del miércoles se emitió una alerta de un usuario que viajaba en un autobús SENDA procedente de Monterrey y con destino a Piedras Negras, el cual denunció que en Monclova subió una mujer con un menor de 2 años que no paraba de llorar y pedía la presencia de su mamá.
Al llegar a Nueva Rosita, una de las pasajeras le preguntó si el niño era de ella, ya que la situación era muy sospechosa; sin embargo, la respuesta de la mujer, que se identificó como la abuela, fue de molestia y de acuerdo a la versión que rápidamente comenzó a circular en redes sociales, de pronto el niño se quedó dormido en uno de los asientos traseros y eso les pareció aún más extraño.
Lo anterior generó que la denuncia llegara al 911 y al llegar el autobús a Piedras Negras ya se había montado un operativo por parte de las autoridades para investigar lo que ocurría en el camión 9430 de la línea SENDA; ahí se entrevistaron con quien dijo llamarse Petra y reiteró ser la abuela del menor.
Aunque en el momento no pudo acreditar con documentos el parentesco con el niño, Petra relató que es originaria de Monclova, pero tiene 11 años radicando en Acuña y solamente acudió de visita con sus familiares para luego volver y entregar el niño a su mamá.
La PRONNIF tomó la decisión de resguardarlo y la mañana de este jueves se presentó la madre del menor quien arribó a las instalaciones de la dependencia procedente de Ciudad Acuña, para presentar el acta de nacimiento y la cartilla de vacunación y tras ello, se le entregó al niño.
Manuel Castaño, delegado de la PRONIF en Piedras Negras, detalló que el menor es hijo único y vive únicamente con su madre y se confirmó que la mujer era la abuela; sin embargo, la actitud del menor en el trayecto de Monclova a Piedras Negras generó una psicosis entre los pasajeros.
