Un bebé prematuro que nació a los 7 meses de gestación podría perder la vida hoy mismo si no se le aplican vacunas para fortalecer sus pulmones que no se desarrollaron del todo, su familia de escasos recursos pide apoyo a la sociedad pues cada una de las aplicaciones cuesta 8 mil pesos y son tres las que requiere para seguir viviendo.
En la cama 23 de la sala 6 del Hospital Amparo Pape de Benavides se encuentra desesperada una joven madre, a quien el pasado miércoles se le practicara una cesárea pues su fuente se reventó a los 7 meses del embarazo.
Jatziri Berenice Moreno Díaz de apenas 17 años dijo sentirse mortificada pues su bebé podría morir en menos de 24 horas si no se le aplica al menos una dosis de “Surfactante Pulmonar”.
Este medicamento que se consigue solamente en clínicas particulares hará que sus pulmones funcionen al cien por ciento, sin embargo cada vacuna tiene un costo de 8 mil pesos y es lo complicado para la familia Moreno Díaz.
El recién nacido que está en incubadora está conectado a un respirador artificial pues por si solo no puede respirar, en caso de que no se consigan las dosis, los especialistas tendrían que intubarlo, pero con dicha acción se corre el riesgo de presentarse un derrame cerebral o la misma muerte por el desgarre al cuerpo en su interior.
“La vacuna cuesta 8 mil pesos en la clínica de especialidades o el magisterio, aparte le mandaron hacer otros análisis de sangre que cuestan 800 pesos, somos de escasos recursos y no podemos pagar esto” dijo la abuelita del recién nacido Karina Moreno Díaz.
Lamentablemente la joven madre no tiene el apoyo del padre del menor, además tiene otros dos hijos pequeños, que viven todos en la casa de su madre en la Colonia Lupita Murguia.
A la cuenta 4766 8404 4222 2894 de Saldazo es donde se pueden hacer depósitos a beneficio del recién nacido.