CIUDAD DE MÉXICO.- Dos veces el mismo rumor en una semana, ya genera más que suspicacia.
Apenas el miércoles pasado CBS informó que antes del duelo de Lunes por la Noche en el Estadio Azteca, entre Texanos y Raiders, el comisionado Roger Goodell se acercó a un aficionado mexicano que portaba el jersey de Tom Brady y le preguntó cómo se sentiría sobre ver al pasador de Patriotas en el País en 2017.
"Probablemente" va a ocurrir, le dijo Goodell.
Esta versión cobró ayer más fuerza luego de que ESPN reportara que Robert Kraft, propietario de Nueva Inglaterra, está interesado en la posibilidad de jugar en la Capital.
Aunque la NFL no ha confirmado que vaya a celebrar el año próximo un partido en México, tiene firmado un contrato con la empresa Televisa para traer al Azteca otro encuentro en 2017 y uno más en 2018.
Los Raiders estarían apuntados para volver la próxima campaña como local e incluso hacer de estos viajes algo constante, publicó ESPN, por lo que el choque entre los malosos y Pats podría convertirse en realidad.
Mark Waller, vicepresidente de NFL Internacional, ha dicho que la intención es hacer de México una sede como Londres.
