El padre José Guadalupe Valdés Alvarado, rector de la Catedral Mártires de Cristo Rey y responsable de la Casa del Migrante, y quien fue hospitalizado el pasado martes a consecuencia de una trombosis venosa profunda, estuvo presente ayer en la misa oficiada por el Obispo de la Diócesis de Piedras Negras, monseñor Alonso Gerardo Garza Treviño.
Visiblemente recuperado, el Padre Pepe dijo estar mejorando de la dolencia y avanzando positivamente la sanación. “Y quiero agradecerles a todos ustedes, por sus oraciones y su preocupación por mi salud. Quiero darle gracias a Dios por todos esos amigos que han estado haciendo oración por este su servidor”.
El presbítero comentó que el padecimiento fue detectado a tiempo, por lo que se le aplicó medicamento anticoagulante, logrando un avance favorable.
Agregó que se le recomendó absoluto reposo, por lo que aún no puede hacer mucho esfuerzo.
