CIUDAD DE MÉXICO.
Tras tres entregas de la cinta La noche del demonio, Elise Rainier (a quien Lin Shaye da vida) toma el rol central de la historia en un recorrido por su origen y demonios. Para Leigh Whannell, escritor de la historia, el hecho de que el personaje de Shaye se convierta en el centro de la historia es un punto necesario para el ambiente que se vive en Hollywood alrededor de las cintas de terror.
“Me encanta que el personaje que hace Lin sea el protagonista. No es un secreto que los personajes de Lin no han tenido un protagónico en las grandes cintas que ha hecho, es una pena. Es algo que Hollywood ha hecho típico: que las mujeres pasen a un segundo término en las películas de terror y me encanta la idea de que Lin juegue el papel importante en estas películas, que tome estos demonios y haga lo que tiene que hacer con su personaje.
“Está diseñada para que fuera una mujer de mediana edad la que hiciera todo esto y tomara el protagónico. Desde la primera película la gente quería este personaje y que tomara el rol central es algo fantástico, algo que ella podía hacer y algo que la audiencia deseaba”, explicó el escritor en entrevista telefónica con Excélsior desde Hong Kong.
Whannell considera que ha llegado el momento en el que es necesario que las mujeres y las minorías sean representadas de una forma correcta dentro de los trabajos de este género cinematográfico ya que por si mismo ofrece un gran espacio para la reinvención, la experimentación y la permanencia dentro del gusto de la audiencia.
Además de que piensa que, para que esta permanencia exista, es importante que también haya apoyo para que las mujeres puedan desarrollarse como guionistas o directoras del género.
Me parece muy necesario que haya mujeres haciendo este tipo de trabajos, me encantaría poder ver cintas de este estilo, de horror, hechas y escritas por mujeres y haría lo que estuviera a mi alcance para que eso sucediera, me parece que el horror es el género que podría sobrevivir en una nueva generación, es un género que tradicionalmente se puede reinventar y en el que se pueden inventar o intentar diferentes cosas, nuevas cosas que lo hagan permanecer relevante.
Me parece muy obvio, a mí, que las mujeres y las minorías deben de ser representadas de una mejor forma en las películas de horror. Jordan Peeele lo hace de una buena forma en su cinta Get Out en la que muestra el racismo al que se enfrentan los negros en Estados Unidos.
Pienso que sería un gran acierto para los directores retratar el horror al que se enfrentan las mujeres, soy partidario de ver eso porque, como hombre, yo no lo vivo pero me gustaría poder entenderlo más allá de mi género.
Amaría ver a una mujer hacer eso, seguro sería el primero en comprar boletos para ver una película hecha por mujeres. Creo que eso viene, en algún punto los cineastas debemos responder a lo que sucede en el mundo”, agregó Whannell.
Con La noche del demonio: La última llave, cinta que se estrena este próximo 5 de enero en las pantallas nacionales, el cineasta Adam Robitel tomó la historia escrita por Whannell y colocó a la actriz Lin Shaye en el centro de la acción con un viaje a los orígenes de su personaje, Elise.
En la cinta se exploran los orígenes de Elise, es como un regreso a su infancia, literal y figurativamente, ella regresa a una cacería que dejó pendiente cuando era niña en Nuevo México, al lugar donde vivió. Se enfrenta a los traumas y a los secretos que tuvo guardados por mucho tiempo en su mente”, dijo el escritor quien también da vida a Specs en la cinta.
Para Whannell La noche del demonio: La última llave no fue algo que tuviera planeado para realizar, sin embargo la propuesta de darle continuidad a sus personajes se volvió algo interesante que le permitiría en esta entrega representar a las mujeres de una mejor forma a través del personaje de Elise.
En realidad nunca tuve un plan trazado de lo que haría después de escribir la primera película, no sabía en realidad si habría una siguiente. Cuando escribí la tercera, en realidad no sabía si haría la cuarta. Luego siguió la idea de hacer una más y fue cuando comencé a pensar en cómo sería. Entonces pensé en colocar a Lin Shaye, con el personaje de Elise, en el papel protagónico de la historia. Tomar esa decisión me hizo pensar que teníamos que ir para atrás en el tiempo y encontrar los orígenes del personaje, que no se habían mostrado.
Los fans de estas cintas saben que el personaje de Lin muere en la primera película, así que en vez de que ella estuviera rondando en forma de fantasma en las películas futuras queríamos volver en el tiempo y saber cómo era y cómo podría haber sido hoy en día”, concluyó.