El Instituto Mexicano del Seguro Social opera con más control en el uso del material y dotación de insulina a pacientes al dotar las autoridades lo necesario conforme a la gente internada, reconoció Gualberto García Pecina, representante en la región Centro de la sección 12 del Sindicato del IMSS.
Gualberto García Pecina, representante de la sección 12 del Sindicato del IMSS.
Con la nueva administración del Presidente Andrés López Obrador, se restringió el medicamento en enfermedades degenerativas y en los hospitales, como la Clínica 7 en Monclova, suministran lo necesario de equipo para trabajar, cuando en anteriores administraciones era más flexible.
Hoy, las personas con diabetes que deben administrarse insulina, se les dosificó y tienen que cuidar su frasco sin desperdiciar, cuando antes les entregaban a libre demanda, admitió. Explicó que el IMSS nunca ha dotado de algunas cosas extras como “venoclisis” que es adicional al catéter para evitar al paciente picarlo varias veces, se le coloca una especie de esponja que puede mantener en su vena, es de un leve costo y el familiar decide si lo compra, pero no es que no tenga el material.
“Estamos trabajando bien, pero sí siento que la derechohabiencia ha rebasado los límites por ejemplo, en el área de urgencias, ya es una área muy chica, entonces hay necesidad de una remodelación que desde hace mucho tiempo está autorizada, que no se ha dado, y sí sabemos que la gente está muy amontonada, hasta nosotros como trabajadores pues nos sentimos incómodos tener en un sillón a varias personas pues ya necesitamos una área más amplia”, expresó.
García Pecina consideró que algunos medicamentos pueden escasear de una semana a otra, pues se surte semanalmente, como el naproxeno y ampicilina que son de receta diaria de los médicos.
Aseguró no haber tenido reportes del personal de que les falte de material para trabajar o que se hayan suspendido las cirugías porque carezcan de material quirúrgico o instrumental.
