Un hombre de la tercera edad y su hija de capacidades diferentes estuvieron a punto de morir intoxicados luego de olvidar un sartén con comida en la estufa, alertando el fuerte olor a quemado a los vecinos de la calle Juárez de la Zona Centro, quienes acudieron a su auxilio.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 13:00 horas, cuando vecinos de la casa marcada con el número 706, ubicada cerca del cruce con la calle Lázaro Cárdenas, olfatearon un insoportable olor que les causó que les ardiera la nariz.
Al percatarse que el humo salía de la casa donde habita don Francisco Solís Carrillo, de 80 años, y su hija, Juana Delia de 48 años, quien cuenta con capacidades diferentes, los vecinos no dudaron en entrar a la vivienda, descubrieron que el humo provenía de la cocina.
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Los socorristas examinaron a Juana Delia pues se intoxicó debido a la inhalación de monóxido de carbono.
A pesar que los vecinos se comunicaron al número 911, indicaron que las radioperadoras los dejaron en la línea, por lo que tuvieron que sofocar el siniestro, apagando el sartén que don Francisco dejó con carne.
Al ver que Juana, quien estaba en una cama, y su padre, estaba a punto de perder el conocimiento debido a la inhalación de monóxido de carbono, los vecinos los cargaron hasta el patio.
Minutos más tarde, el reporte ingresó a la Central del Heroico Cuerpo de Bomberos, desplegándose dos unidades de ataque rápido al domicilio.
Socorristas de Cruz Roja Mexicana acudieron a brindarle los primeros auxilios a padre e hija, por fortuna, se encontraban estables a pesar de la fuerte cantidad de humo que inhalaron.
Debido que el hombre mayor y su hija viven solos, los vecinos decidieron comunicarse con una hija de don Francisco, quien quedó en hacerse cargo de ellos para evitar otra situación de riesgo.
