El homicida de Gabriela Reyna, Juan Diego Hernández Paz fue localizado tras meses de búsqueda en Comanche, Texas y al verse rodeado por los policías, decidió suicidarse de un tiro en la cabeza.
Juan Diego se mató de un tiro en la cabeza.
Juan Diego de 44 años le arrebató la vida a su esposa Gabriela, en hechos ocurridos en el Ejido Balcones, en Acuña, la noche del 23 de junio, cuando bajo los influjos del alcohol y luego de una discusión con la víctima, le disparó en el abdomen; el ama de casa falleció en la Clínica 13 del Seguro Social pocos momentos después de la agresión.
Luego del asesinato, el homicida se trasladó al estado de Texas donde encontró un empleo en una empresa de Vallas y vivía en Ripley Street junto con otras cuatro personas.
Juan Diego le arrebató la vida a su esposa al dispararle en el abdomen.
Al ser alertados por la policía mexicana sobre la búsqueda de Juan Diego, autoridades de Estados Unidos trabajaron en el reporte y de esta manera, el aguacil del Condado de Coleman, Les Cogdill, informó a los Texas Rangers sobre su paradero.
Sin embargo, al verse rodeado de los policías americanos que intentaban hablar con él para arrestarlo, Juan Diego decidió poner fin a su vida y se dio un disparo en la cabeza, muriendo de manera instantánea.
Fue el pasado 23 de junio en el Ejido Balcones cuando ocurrió la tragedia, luego de una discusión con Gabriela la que había sido su pareja de años y bajo los influjos del alcohol, Juan Diego sacó su arma para dispararle en el abdomen.
Desde entonces era buscado por la policía mexicana, misma que emitió el boletín a autoridades de Texas para poder localizarlo y que fuera a juicio por el delito de feminicidio, con el que alcanzaría una pena de más de 50 años.
