Hay equipos que están jugando buen nivel de football pero debido a su pasado reciente dejan dudas de si son tan buenos como han mostrado hasta ahora, estos equipos son: Atlanta Falcons, Dallas Cowboys y Filadelfia Eagles.
Los Atlanta Falcons empezaron la temporada generando dudas, ya que perdieron de locales contra los Tampa Bay Bucanneers. Sin embargo, Atlanta ha conseguido tres victorias de forma consecutiva, lo que hoy los posiciona como líderes indiscutibles de la División Sur de la Conferencia Nacional. Su fuerte: la ofensiva. Son una máquina de anotar. En promedio meten 38 puntos por juego, los mejores de la NFL. El receptor Julio Jones es un espectáculo, es de los mejores de la liga. La semana pasada se metió al muy selecto grupo de 6 jugadores con 300 o más yardas por recepción. Sin lugar a dudas hace que el trabajo del quarterback Matt Ryan sea mucho más fácil, aunque Jones no es la única opción que tienen para hacer daño; el ala cerrada Jacob Tamme es de cuidado al igual que el receptor Mohamed Sanu, los corredores Devonta Freeman y Tevin Coleman completan la amenaza ofensiva de Atlanta. Sería un error olvidar que el año pasado los Falcons empezaron la temporada con 5 ganados y cero perdidos, para después caer como piedras y terminar con un record de 8-8. La defensiva deja muchas dudas, pues en promedio ha recibido 31 puntos por juegos, lejos de ser una garantía. Esta semana visitan a los Denver Broncos, uno de los tres equipos invictos y una de las grandes defensas de la liga. Este será un parámetro para medir a los Falcons.
La era del coach Jason Garrett en Dallas ha estado marcada por la mediocridad. Pero ahora la afición está ilusionada y tiene razón para estarlo. Un inicio de 3-1 hace pensar que se puede aspirar a playoffs, pero más allá de esto, está la sensación de que se vive un cambio en Dallas, una renovación para marcar una nueva era en la franquicia encabezada por Dak Prescott como quarterback, y Ezekiel Eliott como corredor. Los dos han demostrado cualidades por demás interesantes, y cuentan con una de las mejores líneas ofensivas de la NFL. Esta temporada lo están haciendo bien, aunque es una realidad que para ser un equipo aspirante a lo más alto le falta todavía; la defensa tiene que mejorar, el ala cerrada Jason Witten no les durará para siempre, y no hay un receptor que saqué la cara por el equipo, aquí los lectores seguro se preguntan: “¿y qué hay de Dez Bryant?”. Para mi es más problema que solución, los medios de comunicación indican que ha faltado o llegado tarde a reuniones de equipo entre 20 y 40 ocasiones, algo inaceptable, indica la falta de disciplina del jugador, sin mencionar los pucheros que hace en la banca con sus compañeros. En el campo no ha sido ese factor desequilibrante al que le teman las defensas, pero sí puede ser un elemento de discordia, además de que las lesiones se están volviendo una constante en él. Los Cowboys reciben a los Cincinnati Bengals, que están urgidos de triunfo para mantenerse en la pelea del Norte de la Americana, por lo que será una dura prueba para Dallas.
Filadelfia regresa de una semana de descanso para defender su invicto en la casa de los Detroit Lions. Las Eagles son favoritos, pero no será un duelo fácil, con los Detroit Lions nunca se puede estar seguro de nada, una semana se ven como el peor equipo y a la siguiente parecen imparables. ¿Qué cara mostrarán esta semana? Es una incertidumbre. En Filadelfia la gran figura en la actualidad es el quarterback novato Carson Wentz, sin lugar a dudas ha sobrepasado las expectativas, pero la parte fuerte del equipo es la defensiva, que a la fecha se ubica como loa tercera en la liga. Es el turno para que confirmen que lo que enseñaron en la semana 3 cuando le ganaron de manera contundente 34-3 a los Pittsburg Steelers.
De ganar sus juegos, los Falcons, los Cowboys y las Eagles serán equipos para tomarse muy en serio.
