Todos ellos tienen que lidiar con su enfermedad, los viajes a Monterrey y el miedo a morir
Aunque es un tema que a muchas autoridades les duele, es una verdad que no se puede ocultar y que padecen miles de personas con Cáncer, hablando solo en la Región Centro, Desierto y Carbonífera. Todos ellos tienen que lidiar con su enfermedad, los viajes a Monterrey y el miedo a morir, como el caso de Nailea de 49 años quien tiene Cáncer de Seno.
A pesar de que ya se ha manifestado de muchas manera, la solicitud de un área oncológica en la ciudad por la demanda que existe, parece que para los encargados sigue siendo innecesaria, son temas que solo valoran los pacientes oncológicos y sus familiares que viven un verdadero calvario para poder asimilar esta enfermedad y todo lo que se tiene que hacer después para lograr curarte.
Después de una mamografía que detecta una bolita, que después se convierte en Cáncer, lo que sigue pocos lo saben, quienes lidian con esta enfermedad en esta ciudad y las circunvecinas no solo son unas guerreras por tratar de aniquilar el Cáncer, sino también por llegar hasta la clínica 25 de Monterrey a recibir la primera quimioterapia.
Se tarda de uno a tres meses en que el Oncólogo te pueda recibir para valorarte y saber si tienes Cáncer o no, esto por la demanda que cada día crece más, luego de siete a nueve días en que el departamento de Patología te dé los resultados de la biopsia para saber qué tan fuerte es, luego hay que esperar de dos a tres meses para que te puedan recibir en Monterrey e ingresar a la primera quimio o radioterapia.
Sin contar que en esta enfermedad, el tiempo es pieza fundamental, porque entre más pasa; más aumentan las posibilidades de que se vaya a otra parte del cuerpo, que ocurra una metástasis y lo peor que llegue a un órgano vital y no dé tiempo de recibir siquiera las terapias necesarias.
Cuando ya estás dada de alta como paciente foránea en la clínica 25 de Monterrey todo es un poco más fácil, pero es solo por el hecho de saber que tienes tu lugar asegurado, pero hay pacientes que tienen que ir y venir todos los días desde su ciudad hasta Monterrey porque no tienen dinero para quedarse en un hotel o siquiera en una fundación que alberga a personas con Cáncer.
Aunque las primeras dos quimioterapias no son tan agresivas como las siguientes, es un martirio para los pacientes viajar de regreso a Monclova después de ese medicamento tan fuerte que les provoca nauseas, vómito y mareo, aún más, arriba de un camión durante tres horas.
Relata Nailea, que le resulta irónico cómo el Instituto Mexicano del Seguro Social opta por mejor gastar en los boletos de viaje a Monterrey todos los días de cientos de personas, en lugar de invertir en un área oncológica en Monclova.
Eliminar la segunda etapa del Cáncer que se trata en Monterrey, daría como resultado una vida más cómoda para el paciente oncológico, menos cansada y con más fuerza para exterminar a ese cáncer que aún no se sabe de dónde viene ni por qué.
“Es cierto que en el IMSS hacen lo que se puede con lo que se tiene, como pacientes nunca vamos a estar contentos porque siempre vamos a querer ser los primeros en todo, pero realmente esperar hasta tres meses por una consulta y tres para tu primera quimioterapia, se traduce a medio año esperando a tener tu primera dosis contra el Cáncer, eso es más frustrante que ser positiva en esta enfermedad”.
