CUATRO CIÉNEGAS-COAH.- El Gobierno Municipal que encabeza Yolanda Cantú Moncada, no se sensibilizó ni un poco por el lamentable hecho que ocurrió en un bar de la zona de tolerancia al determinar que el lugar siga funcionando tal y como lo ha venido haciendo desde el día que sucedió el feminicidio de Violeta.
"Solo se limpió la sangre tras feminicidio y el establecimiento continuó funcionando".
Aunque el asesinato de Violeta Margarita Parruquín, no fue específicamente en el bar “La Cita” pero si a escasos metros, en una de las habitaciones que tiene el mismo inmueble, el lugar no fue clausurado o cerrado mínimo por unos días, ni siquiera por respeto a la familia de la fallecida y por el dolor por el que estaban atravesando.
Ni los reclamos que hizo la ciudadanía a través de redes sociales ayudaron para que las autoridades hicieran algo al respecto, al considerar que se trataba de un asesinato de una mujer que había dejado a seis hijos en orfandad de la que solamente limpiaron la sangre del suelo para que volviera abrir el bar.
Álvaro Navarro, inspector de alcoholes del municipio, explicó que no hubo ninguna denuncia de irregularidad por ello no procedieron a la clausura del establecimiento en donde mataron con un hacha a Violeta.
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“A como sucedió el caso, no estaba funcionando el local, se encontraba cerrado, el lugar tiene dos cuerpos donde ella se quedaba a pernoctar después de su trabajo y el área del bar”, dijo.
Mencionó que la Comisión de Alcoholes revisó el asunto y determinó que el espacio en el que sucedió el feminicidio no estaba dentro de los perímetros del área que tiene permiso para operar como bar.
“El reglamento de alcoholes no marca situaciones como estas, por ello sigue abierto el negocio y actualmente tiene sus permisos en regla porque aún no vencen los plazos de pago del refrendo”, señaló.
