FRONTEREA., COAH.- Después de que el pasado fin de semana fue detenida por seguridad pública una madre de familia que conducía en total estado de ebriedad mientras estaba acompañada de su pareja y sus hijos menores de edad, la Delegada de la PRONNIF en el Municipio dijo que los pequeños fueron puestos en resguardo mientras se realizaban las investigaciones.
La Coordinadora de la PRONNIF Frontera Norma Leija dijo que los niños fueron puestos en resguardo mientras se realizan las investigaciones correspondientes.
Norma Leila, dijo que fue el departamento de Seguridad Pública quien dio aviso a la Procuraduría de los Niños, Niñas y Familias cuando se realizó la detención de la mujer que conducía totalmente alcoholizada y era acompañada de su esposo quien también se encontraba en estado etílico, poniendo así en riesgo a sus pequeños hijos de 7 y 12 años.
“Nos pidió Seguridad Pública municipal que interviniéramos, ya que detuvieron a una mujer que conducía a exceso de velocidad en las calles del municipio, mientras llevaba consigo a sus hijos, al detenerla no quiso ni pudo declarar, por lo que los pequeños fueron llevados a resguardo temporal para proteger su integridad física”.
La Delegada dijo que es importante que los padres de familia eviten salir de fiesta o emborracharse mientras traen a sus hijos consigo, ya que ponen en riesgo su seguridad y su integridad, al estar fuera de sus facultades por el exceso en el consumo de alcohol.
“Nosotros acudimos cuando se presentan situaciones extraordinarias de esta índole para poner a salvo a los niños, en este caso los pequeños fueron revisados por el médico legista y se determinó que no cuentan con señales de maltrato, abuso u omisión de cuidado, sin embargo al estar tanto papá como mamá en estado etílico, fueron llevados a resguardo con la intención de iniciar con la investigación correspondiente”.
Aseguró que este caso fue turnado a la Coordinación de PRONNIF Región Centro con la intención de que realicen las diligencias correspondientes, toda vez que los pequeños serán entregados solo cuando se determine que no viven en situación de riesgo y que los papás no volverán a cometer la falta de traerlos consigo mientras conducen en estado de ebriedad.
